De paseo por las fuentes y poesías de la Alpujarra de Granada
El agua es el absoluto protagonista en Lanjarón, uno de los municipios más emblemáticos de la provincia a causa de sus tinaos, sus miradores y los mensajes que adornan sus fachadas
El agua resuena por todos los rincones de Lanjarón. El municipio impresiona por sus calles, sus casas y, por supuesto, sus fuentes. La entrada a la Alpujarra de Granada supone un adelanto de todo lo que el visitante podrá encontrar en muchos de sus territorios, pero con una diferencia que la hace única: el agua despierta la inspiración.
'Y sentí borbotar los manantiales como de niño yo los escuchara. Era el mismo fluir de música y ciencia ignorada'. Poemas tan puros como este de Federico García Lorca se pueden apreciar con tan solo acudir a beber. Las fuentes de Lanjarón están adornadas con versos del poeta granadino, además de otros autores. Todos ellos basados en la visión lorquiana de este bien natural.
Basta con pasear por el barrio Hondillo para toparse con diversas fuentes con sus pilares correspondientes. Se trata del casco histórico del municipio, compuesto por calles angostas, luminosas placetas y los tradicionales tinaos. De origen medieval, en el Hondillo se halla la placeta Colorá. Adornada con un sinfín de flores, es uno de los puntos más coquetos de Lanjarón. Por supuesto, no falta su fuente.
También destaca el Pilarillo del Chato, situado en la plaza del Chato, pero uno de los puntos principales del municipio es la Placeta de Santa Ana. Rodeada de casas blancas, las flores le añaden color a una estampa llena de poesía. Versos de Lorca, Benítez Carrasco y más poetas decoran los muros de la placeta, cuya fuente central es el sitio de encuentro para los vecinos de toda la vida. 'Paz del alma, remanso de prisas, canto del agua', reza una placa.
Tras el recorrido del agua, los amantes de la naturaleza pueden proceder a ascender hasta los miradores de Lanjarón. Una espectacular panorámica del Parque Natural de Sierra Nevada o del Castillo se pueden presenciar desde el mirador de los Héroes o el de la Cañona. 'Lanjarón... que vas llorando por tus grietas agua pura. Aunque me calman la sed, también me sirven de cura'.
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