El SOS de los monumentos jienenses

En el caso del convento ubetense, en 1990, uno de sus claustros fue demolido ilegalmente, recalcan desde la asociación. En el año 2005 se iba a proceder a derribar los restos de su iglesia, muros y portadas, pero gracias al Ayuntamiento de Úbeda se paralizó su demolición y se restauró su entrada principal.

«De él se conserva una portada muy sencilla, con arco de medio punto y en su interior los restos de una capilla de una sola nave, permanecen importantes restos de la nave de la iglesia conventual, (donde quedan alojadas grandes tinajas de barro), así como parte del perímetro de la clausura, con sus artísticas portadas de estilo grecorromano y algunos arcos de diversas capillas funerarias y enterramientos de la alta nobleza de la ciudad», señalan desde Hispania Nostra.

En cuanto a su conservación llaman la atención sobre las «ruinas de la iglesia neoclásica, que paulatinamente se van deteriorando sin que nadie haga nada por ellas, cubriéndose vegetación».

La asociación advierte de que «si no se actúa pronto, corre el riesgo de desaparecer sus interesantes restos ornamentales. En su solar aún se conserva muchos secretos históricos». El edificio no tiene protección específica y está en manos privadas.

Es el último triste ejemplo en una provincia volcada en crecer con el turismo cultural, de sensaciones e interior, con dos ciudades declaradas Patrimonio de la Humanidad, Úbeda y Baeza, una Catedral que aspira a serlo y multitud de monumentos y edificaciones de primera magnitud, el dato da para reflexionar. La asociación lleva una década realizando este listado para poner bajo los focos esta problemática a nivel nacional y lograr su restauración y conservación.

A principios de año fueron los restos arqueológicos del APA III San Andrés, es decir, de la judería de Jaén, los que fueron incluidos en la lista. Para su defensa, esgrime que «dichos restos arqueológicos permiten conocer la evolución urbanística e histórica de la ciudad de Jaén». En este caso el Ayuntamiento de Jaén ha anunciado ya intervenciones en la zona, que como ha ocurrido en otros casos, permitan su rehabilitación y pasar a la 'lista verde'.

La judería está en un momento clave, por tres razones. Acaba de asumir la presidencia de la Red de Juderías de España, un selecto club del que estuvo a punto de ser excluida por la deuda acumulada. En segundo lugar, porque los fondos Edusi pueden ayudar a su conservación y difusión. Y en tercero, porque el actual concejal de Cultura presidió en su día la asociación cultural Patmos, que con Iuventa reclamaron su recuperación. De ahí que diga que habrá «un antes y un después».

Algo parecido ocurre con el cementerio de San Eufrasio, el camposanto viejo de la capital, que podría salir también del listado, como ya ha ocurrido con otros enclaves. Clausurado para enterramientos desde 2002 y con una fosa común de más de 1.600 víctimas del franquismo se cae a pedazos. En 2011 fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) por ser un ejemplo de la arquitectura mudéjar, entre otras cuestiones. El año pasado fue incluido en la Lista Roja. La idea del Consistorio es invertir parte también de los fondos europeos en este espacio, recuperarlo de su dejadez y ajardinarlo al estilo inglés, con bancos y sitios por donde pasear y contemplar las «auténticas obras de arte» que alberga San Eufrasio, donde están enterrados los jienenses más ilustres.

Cuatro espacios más se sumaron a esta lista que saca los colores a la provincia en 2018. El último fue la Torre de Benzalá, en Torredonjimeno, incluida en la lista en junio de este año. La torre declarada Bien de Interés Cultural, corre peligro de que sus muros colapsen. En el mes de mayo ingresaron los otros tres elementos: el cementerio de San Eufrasio de Jaén y el Molino del Cubo de Torredonjimeno, y el convento de Santo Domingo, en La Guardia. Éste último es también un Bien de Interés Cultural (BIC) del siglo XV que se encuentra «en estado de ruina progresiva», con «peligro de derrumbe» de los muros «si prosigue su abandono».

Otra inclusión sangrante fue la del convento de Santo Domingo en La Guardia. También están en 'alerta roja' el yacimiento arqueológico y rupestre de Otíñar, la Casa de Piedra (Antigua Parroquia de San Miguel), el Puente de Ariza, el Castillo de la Peña de Martos, el de Giribaile y así hasta superar la treintena.