Los Cármenes se pone a tono

El estadio Nuevo Los Cármenes se vestirá de gala el próximo 12 de noviembre, con motivo del partido que disputará la selección española frente a Macedonia, incluido en el grupo de la fase de clasificación para el Mundial de 2018 en Rusia. Será el segundo encuentro que el combinado nacional va a jugar como anfitrión en esta nueva etapa que se abrió este verano tras el nombramiento de Julen Lopetegui como nuevo seleccionador. Desde el Ayuntamiento de Granada ya se están tomando medidas para que la instalación esté reluciente ese día. La ciudad será el foco de atención a nivel internacional y nada puede fallar.

El objetivo primordial es disponer de un césped en perfecto estado. Es uno de lo requisitos que se pide por parte de la Federación Española de Fútbol para conceder la organización de estos partidos. La incertidumbre apareció cuando en los dos primeros partidos de Liga de esta temporada se pudo observar que la hierba no reflejaba un buen estado y salieron a la luz pública las quejas del entrenador del Granada, Paco Jémez. El bote del balón no era el adecuado, no rodaba de forma uniforme en todas las zonas y todo eso hizo levantar la alarma.

Sin embargo, ya se han tomado medidas para acondicionar la hierba, que comienza ya a recuperarse, como se pudo observar el pasado miércoles en el encuentro disputado frente al Athletic. Se está agarrando mejor a la superficie y el césped se levantó con menor frecuencia que en los otros dos partidos disputados con anterioridad, lo que ya alivia y confirma que se está en el buen camino para que no sea impedimento en el desarrollo del juego y ningún futbolista muestre quejas a la hora de jugar.

Es el único problema que presentaba el estadio y se está subsanando para que está reluciente de ahora en adelante, algo que también se exige por parte de la LFP (Liga de Fútbol Profesional), que valora el estado del césped. Antes de los partidos se evalúa por parte de los técnicos la altura, dureza, cobertura, uniformidad, tracción rotacional, corte y marcado. El terreno de juego deberá estar libre «de malas hierbas», según se recoge en el documento. De lo contrario habrá sanción.

El estadio de Los Cármenes está perfectamente equipado para acoger cualquier partido internacional, al margen de los encuentros que disputa allí con regularidad el Granada. La instalación ha cumplido recientemente 21 años. Ya ha sobrepasado la mayoría de edad y está preparada para grandes acontecimientos futbolísticos. Se inauguró el 16 de mayo de 1995 con un partido amistoso que disputaron el Real Madrid y el Bayer Leverkusen. Fue además el escenario de la ceremonia inaugural de los Campeonatos del Mundo de Esquí Alpino en febrero de 1996. Ya han pasado dos décadas de aquello y la instalación ha sido objeto de mejoras.

Obras de mejora

Tiene capacidad para albergar a 22.094 espectadores, después de que se hayan retirado asientos este pasado verano de la parte baja de las dos esquinas que hay situadas junto a la grada de preferencia. El objetivo es aumentar la seguridad y contar con dos zonas más de evacuación en caso de que se produzca algún problema. De todos modos, la reducción ha sido mínima y se atiende la demanda existente por parte de los espectadores. Con el paso de los años se han dado cambios para efectuar mejoras. Con motivo del ascenso a Primera del Granada en el verano de 2011 se aumentó el aforo, al disminuir el espacio de separación entre los asientos y colocar gradas supletorias en las cuatro esquinas. De esa forma se ganaron en torno a 6.000 localidades más. El estadio en su origen contaba con algo más de 16.000 asientos, que ha aumentado con el paso del tiempo.

Los vestuarios también se mejoraron en su momento con una serie de obras. Se construyó una zona VIP en lo más alto de la tribuna y esa decisión ocasionó que se suprimieran en esa lugar las cabinas para los medios de comunicación. Fueron trasladadas a la parte de enfrente en preferencia, con más espacio y asentadas sobre una estructura en la parte de arriba.

También se amplió la sala de prensa hace unos años y en unos meses se contará con una nueva, que será más amplia. El estadio dispone de una zona de control, ubicada en la entrada, en medio de los dos vestuarios principales. Desde allí se controla toda la iluminación con la reproducción en pequeño de la instalación. Están también las diversas cámaras de seguridad para poder vigilar cualquier rincón del estadio y detectar alguna incidencia que se pueda dar. Desde otra zona se controla el videomarcador para los días en los que hay partido. Las oficinas del club están en la tercera planta y hay diversas salas para guardar material.

700 kilos de semilla

Lo que preocupaba era recuperar la calidad del césped y eso ya se está logrando. Al terminar la pasada temporada se efectuó una resiembra, pero luego las altas temperaturas del verano han originado problemas, por lo que se replantaron 200 kilos de semilla antes del primer partido de Liga de este curso. «La idea era que germinase bien, pero ya sabemos que Granada es complicada en el clima, porque las temperaturas son altas en verano y muy bajas en invierno, y eso afecta a la hierba. Es lo que hace que el tipo de semilla que usamos sea muy resistente, para que aguante todo eso», indicó a este diario Eduardo Castillo, concejal de Deportes del Ayuntamiento de Granada.

En agosto se plantó semilla de la variedad festuca y a primeros de octubre será de ray grass. Con ese plan de tratamiento se confía en que esté radiante en poco tiempo. Ya se puso en marcha un plan de choque para que mejorara tras el encuentro frente al Eibar y en pocos días se efectuará una regeneración con otros 700 kilos de semilla. «Para cuando llegue la selección las condiciones serán óptimas, aún falta un mes y tres semanas y ya se apreciarán los resultados, una vez que bajen las temperaturas y comience a llover con cierta regularidad, el campo estará impecable», sostiene Eduardo Castillo.

La actuación para la mejora del césped de Los Cármenes corre de la mano con los nuevos gestores del Granada. «Por nuestra parte estamos proporcionando la ayuda técnica y de personal, porque el propósito de las dos partes es que el terreno de juego se encuentre en la mejor situación posible. Estamos rotando con uno de nuestros jardineros y apoyamos en el día a día para el mantenimiento. Lo que buscamos es que esté perfecto y ya se observó la mejoría el otro día», manifestó Ángel González Segura, nombrado recientemente como director de infraestructuras, operaciones y compras de la entidad rojiblanca.