El Granada se gana decidir su propio final
Los rojiblancos dan un paso adelante tanto con el balón como sin él al recobrar la fe en sí mismos con Pacheta, que además va recuperando para la causa a futbolistas que parecían desahuciados
1. Ninguna de las otras dos ocasiones recientes en las que el Granada recuperó el derecho a depender de sí mismo para jugar el 'play off' de ascenso y, por tanto, volver a Primera división de manera inmediata, desbordó tanta convicción como ahora para la última jornada del campeonato. Los rojiblancos han dado un paso adelante tanto con el balón como sin él al recobrar la fe en sí mismos con Pacheta, demostrando que seguían a tiempo cuando fue destituido Fran Escribá.
2. Como pasó en Riazor por el debut con Pacheta, el Granada volvió a coleccionar ocasiones clarísimas de gol contra el Castellón como para irse al descanso con más ventaja de la que llevaba. Sin especular de nuevo, menos aún al jugar en Los Cármenes, los rojiblancos dominaron el partido desde una posesión del balón no exenta de verticalidad –con los envíos directos de Luca Zidane para Abde Rebbach o Lucas Boyé como muestra– y manifestaron su ambición por recuperar su tenencia cuando no la poseían, agresivos incluso en campo contrario a diferencia de la complacencia con Escribá.
3. Pacheta advirtió al llegar que sus primeros mensajes a la plantilla serían sencillos, pero el Granada muestra ya automatismos con él. Un ejemplo son las triangulaciones para salir jugando desde atrás. Otro, las instrucciones que sus futbolistas obedecen en tareas defensivas, con una activación muy superior.
4. La nueva propuesta de los rojiblancos, sin embargo, tiene sus riesgos. Para el entrenador burgalés parece innegociable ir a buscar al contrario aunque se vaya un gol por delante, con la ambición por el segundo como primer mecanismo defensivo. Una vocación loable pero inevitablemente condicionada por la resistencia de los actores implicados. Con el Castellón, como antes con el Deportivo, la victoria peligró durante la segunda parte pese a los méritos de la primera.
5. Si los dos goles de Coruña al descanso terminaron quedándose cortos, más aún el de la diferencia mínima en el Zaidín. El Granada perdonó la sentencia en varias ocasiones y lo pagó en una concesión mínima, sin los errores de bulto de otrora pese a las dudas que sí evidenció Loïc Williams, pero igualmente grave.
6. El bloqueo que el empate provocó puso a prueba la paciencia del granadinismo después de tantos chascos. La valentía de Pacheta, sin embargo, inclinó también la balanza de la fortuna al final.
7. El sacrificio de Sergio Ruiz para la inclusión de Martin Hongla evidenció que reunir a Gonzalo Villar y Manu Trigueros el mayor tiempo posible resulta imprescindible para el nuevo entrenador del Granada; algo que rara vez ocurría antes. Ya había coincidido con ambos, en el Elche y en el Villarreal, respectivamente, y les ha concedido las llaves de la medular.
8. Pacheta, además, parece haberse propuesto recuperar para la causa a futbolistas que parecían desahuciados. En Riazor reanimó a Manu Lama y a Carlos Neva; con el Castellón, a Luca Zidane. También le viene agradeciendo el mayor rodaje Kamil Józwiak. Ahora espera que también lo haga Stoichkov.
9. Las apuestas por Luca y Hongla tienen visos de continuidad en Santander por las similitudes entre la propuesta del Racing y la del Castellón. El portero galo ya fue clave para Escribá en el partido de Los Cármenes por la misma razón que para Pacheta en esta última ocasión.
10. Nadie quiso perderse el que quizás fuera el último partido de la temporada en Los Cármenes. Por allí aparecieron exrojiblancos como Quini o Raúl Torrente, y también un cedido como Pablo Sáenz. Todo apoyo es bienvenido por el 'play off'.
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