Diez largas semanas sin Domingos
Baja importante ·
El central de más nivel de la plantilla sigue impedido desde el 27 de septiembre y no está nada claro que pueda volver en CádizEl Granada encadena ya más de dos largos meses sin el central de más nivel de su plantilla. Hoy se cumplen diez semanas del terrible choque entre Domingos Duarte y Luís Maximiano en Balaídos, durante el partido contra el Celta de Vigo, que tiene al zaguero impedido desde entonces. Corrían 69 minutos de juego cuando Domingos cometió penalti al agarrar a Santi Mina dentro del área ante un centro de Hugo Mallo desde el lateral; tanto el defensa como el delantero cayeron al suelo, pero fue el rojiblanco quien se llevó un brutal impacto de su guardameta con la rodilla sobre el pecho y el cuello. Quedó conmocionado y fue sustituido. No ha vuelto a tener minutos desde aquello.
Fue un atropello en toda regla. Es más, los servicios médicos del club se encontraron al tratarle con secuelas más propias de un accidente automovilístico. Se consultó a expertos del mundo del rugby, un deporte en el que este tipo de lesiones son algo más habituales. Tras varios días de estudio, el diagnostico precisó que Domingos Duarte sufría una afectación en plexo braquial, un conjunto de nervios que van de la parte inferior del cuello a la superior del hombro, lo que limitaba su movilidad. El plazo de recuperación quedó incierto y aún lo es, pese a encontrarse ya mejor.
Aunque Domingos Duarte empezó a dejarse ver sobre el césped de la Ciudad Deportiva la semana pasada, de forma individual y también con el grupo de manera parcial, aún sufre mareos al jugar la pelota. No está nada clara su disponibilidad para el próximo partido del equipo, en siete días en Cádiz. También parece improbable que esté apto para competir allí Víctor Díaz, tras sufrir una lesión fibrilar en el isquiosural de su pierna derecha contra el Real Madrid, y está descartado hasta fin de año como mínimo Germán Sánchez, al producirse un esquince en la rodilla izquierda tras un salto en San Mamés.
Sin tres de los cuatro centrales de la plantilla, Robert Moreno está obligado a mantener su apuesta por Luis Abram, el único apto, junto al canterano Raúl Torrente. Dos zurdos a los que de momento no se les están viendo las costuras pese a las dificultades para perfilarse en la salida de balón del peruano, que es quien está asumiendo por ahora el lado de la zaga que le es antinatural para proteger a su compañero de 20 años. Aguarda la oportunidad en caso de necesidad otro 'cachorro' como Pepe Sánchez, junto a Sergio Barcia, capitán del Recreativo, que ya fue citado frente al Alavés. Ambos son diestros.
Balance
En lo que va de Liga, el Granada ha jugado siete partidos con Domingos Duarte y ocho sin él. Pese a que nadie puede dudar de la capacidad del portugués, quien además de un central excepcional es uno de los jugadores más cotizados de la plantilla, los rojiblancos fueron incapaces de ganar en los siete encuentros que afrontaron con él. Disputó todos los minutos posibles hasta su lesión pero el balance no fue de más que de cuatro empates y tres derrotas, si se le contabiliza como unas tablas su participación en Vigo hasta el fatal accidente que le retiró del duelo.
Curiosamente, la primera victoria del Granada en la temporada llegó en el primer encuentro del curso sin él: ante el Sevilla. Fue entonces cuando ocupó su lugar el capitán Víctor Díaz, prácticamente inédito hasta entonces, con una única titularidad como lateral derecho en la debacle de Vallecas. El sevillano se convirtió en indiscutible desde entonces, alternando pareja de baile con Germán Sánchez y Luis Abram hasta su reciente lesión frente al Real Madrid. Con él llegó también el triunfo ante el Levante. En total, de ocho partidos sin Domingos Duarte, el Granada ha vencido tres, empatado otros tres y perdido solo dos –los consecutivos ante Espanyol y Real Madrid–.
Pese a ello, la vuelta de Domingos Duarte se anhela como agua de mayo. Fue absolutamente esencial para Diego Martínez, quien hizo de un prometedor central de Segunda división –en la que militó con el Deportivo de la Coruña– un solventísimo zaguero al máximo nivel, una de las vértebras de la columna vertebral del equipo en el salto a la Europa League. El luso aportó contundencia y sobre todo muchísima personalidad, la que le llevaba también a procurar una salida de balón aseada con la calidad que ostenta y que también aprecia Robert Moreno.
Sin embargo, Domingos Duarte no estaba ofreciendo ni mucho menos su mejor versión esta temporada hasta su lesión. Con el campeonato ya iniciado y el mercado de fichajes aún abierto, el Tottenham Hotspur se planteó su fichaje y el zaguero se vio tentado por la ilusión de sumarse a la Premier League, pero los londinenses no estuvieron nunca dispuestos a acercarse a los treinta millones de euros que marca su cláusula de rescisión y que la dirección rojiblanca tomaba como referencia aunque no se aferrase a esta cifra.
Hubo pese a todo incertidumbre hasta el último día. Estuvo, de hecho, muy desconcentrado en la goleada sufrida contra el Rayo, con errores impropios en algunos de los cuatro goles que aquella tarde encajó el Granada. Se redimió, no obstante, dos jornadas después en el empate del Camp Nou, donde abrió el marcador cuando apenas había discurrido algo más de un minuto, de cabeza tras un centro de Escudero. Allí volvió a brillar como solía, pero solo una semana después Luís Maximiano se lo llevó por delante en Balaídos.
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