Cinco capitanes al rescate
Liderazgo ·
Robert Moreno apuesta de inicio en el Ciutat de Valencia por Víctor Díaz, Germán Sánchez, Ángel Montoro, Quini y Jorge Molina y estos le responden
Nunca hubo una gran estrella que guiase al Granada hacia Europa ni por el continente. Aquella hazaña nació en un vestuario de Segunda división, comandado por Diego Martínez pero capitaneado por una serie de futbolistas veteranos que jamás pudieron imaginar lo que vivirían en las temporadas sucesivas. La fortaleza que generaron entre esas cuatro paredes referentes que aún perduran en el equipo como Víctor Díaz, Germán Sánchez, Ángel Montoro o Quini explica todo el éxito posterior. Fue lo primero que entendió Robert Moreno cuando asumió el puesto de entrenador, y aún no deja de asombrarle.
Las apuestas del catalán, sin embargo, han ido variando desde que arrancó la temporada debido a los traspiés sufridos. Dio galones a Monchu Rodríguez desde verano y trató de integrar en la dinámica con titularidades a otras incorporaciones en baja forma como Carlos Bacca o Santiago Arias. Sin embargo, y en los momentos más delicados del equipo, Robert Moreno asumió que quienes iban a rescatar al Granada eran sus capitanes, los integrantes del núcleo duro que llevaron su escudo hasta donde nadie había soñado antes. En el Ciutat de Valencia, con el Granada en descenso y solo cuatro días después de empatar con un Getafe colista en Los Cármenes, el entrenador dispuso de inicio a los cinco encargados de portar el brazalete esta temporada.
Quini, Víctor Díaz y Germán Sánchez en la zaga; Ángel Montoro, en el centro del campo; y Jorge Molina, en la punta del ataque. Los cinco capitanes del Granada este curso fueron titulares en el Ciutat de Valencia y contribuyeron con fantásticas actuaciones personales a una excelsa prestación colectiva, en el encuentro más convincente del equipo desde que lo dirige Robert Moreno. Con tres goles y una portería a cero, los rojiblancos saltaron de los puestos de descenso de un plumazo hasta la decimocuarta posición de la clasificación y hundieron de paso a un rival directo como el Levante, que lo había preparado todo para conseguir la que pretendía que fuese su primera victoria en lo que va de campeonato, asignatura aún pendiente.
Robert Moreno ya dio la titularidad a Víctor Díaz ante el Sevilla en la noche en la que el Granada conquistó su primer triunfo en la campaña. El primer capitán del equipo no había actuado de inicio previamente más que en la debacle de Vallecas, donde padeció un infierno como lateral derecho con el marcaje de Álvaro García. Desde entonces, y como hasta aquella tarde, sus minutos fueron testimoniales. Contra el Sevilla, el entrenador apostó por él de nuevo, ya como central diestro, y este le respondió con un gran partido en una noche redonda para todos. Luego, le agradeció su profesionalidad: «Su foto debería aparecer en el diccionario junto a la palabra 'capitán'». Tuvo un agradecimiento similar el pasado jueves con Jorge Molina, cuando este empató en el minuto 97 el encuentro contra el Getafe en Los Cármenes. «Me alegro mucho por él», expuso, sabedor de que quizás no le había premiado con los minutos que quizás merecía.
Como ellos dos, que volvieron a saltar de inicio en el Ciutat de Valencia, también Quini tuvo que trabajar duro para ganarse el puesto tras haber pasado inadvertido para Robert Moreno en las primeras jornadas. De los cinco capitanes titulares contra el Levante, solo Ángel Montoro y Germán Sánchez gozaron de una confianza plena del entrenador desde el primer día, aunque el gaditano alternó con Luis Abram el rol de central zurdo y de hecho fue suplente en los tres partidos anteriores contra Sevilla, Osasuna y Getafe. El barbudo regresó a la zaga para frenar a su excompañero Roberto Soldado junto a Víctor Díaz y entre los dos, que tanto le conocen como antiguo capitán del equipo y parte de aquel núcleo duro, le hicieron la noche imposible. Una sobriedad que también exhibió desde el lateral Quini, ya fuese ante Franquesa, Morales, Clerc o quien fuese que pasase por su zona.
Nunca dudó Robert Moreno de Ángel Montoro, aunque no siempre pudo disponer de él. Superadas las molestias en el sóleo que le hicieron pedir el cambio al descanso frente al Sevilla y no salir hasta el final en Pamplona, el valenciano desempeñó de inicio su nuevo rol de segunda punta liberado contra el Getafe pero volvió a la sala de máquinas, varios pasos atrás, en el Ciutat de Valencia. Aportó sus acordes a la dulce sinfonía del equipo. También aportó lo suyo Jorge Molina, más allá de su peligro permanente en el área, con su talento para retener el balón y jugarlo con sentido siempre, ofreciendo continuidad a cada jugada. Hasta el lunes, sumaba la mitad de minutos que Carlos Bacca.
Los otros
El Granada tiene cinco encargados de lucir el brazalete, votados desde el vestuario, pero más de cinco capitanes. En el núcleo duro del equipo también se encuentran otros como Carlos Neva, Antonio Puertas, Luis Milla o Rubén Rochina en esta segunda etapa que sienten el rojiblanco como mucho más que una cuestión personal. El almeriense se reenganchó con un gol que celebró reivindicándose a él mismo y al escudo. Los líderes del Granada, que son más de cinco, toman el timón.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
