Los capitanes vuelven por la batalla de Cádiz
Recuperaciones ·
Víctor Díaz y Germán Sánchez entrenarán desde mañana con el grupo y apuran para reforzar la defensa ante un derbi andaluz crucial para los dos entrenadores
Final tras final, el Granada encara el próximo lunes en el Nuevo Mirandilla de Cádiz un derbi andaluz crucial para ambos equipos. El conjunto de Álvaro Cervera es el que marca el corte del descenso en este momento, con doce puntos, a tres de los rojiblancos, que podrían volver a la zona roja de la clasificación si no consiguen vencer. Una derrota arrojaría muchas sombras sobre ambos entrenadores, muy tocado Cervera tras tres derrotas consecutivas y cuestionado también Robert Moreno pese a la última victoria agónica contra el Alavés en Los Cármenes.
Los preparativos son de auténtica batalla, conscientes ambos equipos de lo que se juegan. Todos los refuerzos posibles serán pocos. De ahí que los dos primeros capitanes del Granada, Víctor Díaz y Germán Sánchez, hayan acelerado sus respectivos procesos de recuperación con tal de estar disponibles para Robert Moreno en el Nuevo Mirandilla. Ambos entrenarán con el grupo el jueves, según informaron a IDEAL fuentes del club, tras dejar atrás la lesión fibrilar que se produjo en el músculo isquiosural derecho el lateral diestro ante el Real Madrid el pasado 21 de noviembre y un esguince en su rodilla izquierda el central el central en San Mamés cinco días después.
Si el entrenador les ve plenamente recuperados, podrán reforzar a una defensa muy mermada en los últimos partidos. El Granada terminó ante el Athletic con Luis Abram y Raúl Torrente en la zaga –zurdos ambos, algo poco frecuente en el fútbol– y se vio obligado a mantener esta apuesta ante la falta de alternativas contra el Alavés, con Pepe Sánchez y Sergio Barcia, zagueros del Recreativo, en el banquillo. Asentados como pareja en los partidos anteriores a sus percances, ambos veteranos de 33 y 34 años –aunque Germán cumplirá 35 el lunes, a un día de volver a la que fue su casa– aportan mucha seguridad a una línea defensiva que acusó demasiada fragilidad en las primeras jornadas de Liga.
Mimo con Montoro y Escudero; Butzke, sancionado
Ni Víctor Díaz ni Germán Sánchez entrenaron el martes con el grupo. Se quedaron en el gimnasio, con trabajo preventivo al igual que Ángel Montoro y Sergio Escudero, cuyas molestias no les impedirá tampoco participar en Cádiz aunque se tenga mimo con ellos. Aunque el equipo no entrene este miércoles, podrán aprovechar la jornada festiva para seguir poniéndose a punto en la Ciudad Deportiva. Sí se ejercitó el martes con sus compañeros, al menos de forma parcial en los minutos de puerta abierta para los medios de comunicación, Domingos Duarte. Sin embargo, el portugués se encuentra prácticamente descartado para ir a Cádiz al encontrarse aún falto de la seguridad necesaria para la competición pese a que ya se encuentre mejor de la afectación que arrastra desde hace diez semanas en el conjunto de nervios del plexo braquial, entre el cuello y el hombro.
El martes, el preparador físico Juanjo del Ojo diseñó una sesión de entrenamiento corta, de apenas 65 minutos, pero con gran intensidad. Todo empezó con los rondos habituales y siguió con una serie de ejercicios con balón antes del trabajo táctico. Reforzaron al primer equipo varios hombres del Recreativo. Además de los defensores Raúl Torrente y Pepe Sánchez, plenamente integrados, participaron el lateral izquierdo Eu, el centrocampista Da Costa, el extremo Bryan Zaragoza y el delantero Dani Plomer. Eu, Da Costa y Plomer se retiraron para ejercitarse al margen tras los rondos, cuando el entrenamiento se cerraba para los medios de comunicación. No entrenó por prevención Adri Butzke, quien además vio la quinta amarilla con el filial ante el Atlético Levante y no estará disponible para Robert Moreno en Cádiz.
Puertas, con normalidad
Quienes sí trabajaron el martes con aparente normalidad fueron Antonio Puertas e Isma Ruiz. El almeriense, que marcó un golazo al Alavés para abrir el marcador, acabó sustituido con molestias en un gemelo, pero el propio Robert Moreno le restó gravedad tras el partido al igual que a las de Sergio Escudero. El canterano granadino, por su parte, vuelve a estar disponible tras superar el esguince del ligamento lateral interno de la rodilla derecha que aquejó tras sumar media hora frente al Real Madrid tras recuperarse milagrosamente, en menos de un mes, de una rotura parcial del ligamento cruzado posterior en la misma articulación. Una alternativa más para una medular en la que también se espera la vuelta de Ángel Montoro tras su sanción ante el Alavés, con todos los centrocampistas disponibles junto a Gonalons, Milla, Monchu y Eteki.
Con todo, y además de la de Domingos Duarte, las únicas bajas que Robert Moreno cuenta por seguras para ir a Cádiz son las de Darwin Machís y Rubén Rochina. Ambos cayeron en San Mamés, al igual que Germán, pero con lesiones de mayor gravedad: una rotura fibrilar en el isquiosural derecho el venezolano y un esguince en el tobillo izquierdo el valenciano. Quizás no vuelvan hasta 2022.
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