Santa Fe presume de su historia
Decenas de vecinos se visten con trajes de época para conmemorar las Capitulaciones en un ambiente festivo y lleno de literatura, música y tradiciones
«Por ahí vienen», se escucha al inicio de la Plaza de España de Santa Fe. Los caballos irrumpen en el espacio acompañados de toda una representación cuidada al detalle que se abre paso frente a una multitud expectante. Sobre los banderines, se advierte una fecha clave: 'Santa Fe 1492'. Los Reyes Católicos saludan y toman la palabra, pero desde el escenario. El público observa atento y aplaude.
Así vivió ayer la localidad granadina la teatralización del acto de la firma de las Capitulaciones entre Cristóbal Colon y los Reyes Catolicos. Las decenas de asistentes que no se quisieron perder ayer el acto en el municipio se sumaron desde primera tarde al ambiente vestidos con trajes propios de la Edad Media y completaron una estampa compuesta por banderines amarillos, granates, verdes y azules con la que se dio inicio de la celebración del 533 aniversario del acontecimiento histórico en Santa Fe.
El municipio reivindicó ayer su legado colombino, con un documento que 'volvió' a ser firmado por los Reyes Católicos en la Plaza de España, en el mismo punto que supuso la partida para descubrir el Nuevo Mundo.
Arrancó un año más una celebración que se extenderá durante todo el fin de semana, que llenará la ciudad de actividades y en la que sus asistentes podrán disfrutar de una amplia programación que hace viajar a sus vecinos y visitantes varios siglos atrás en el tiempo. La ciudad se engalana año tras año en esta fecha tan especial para que sus habitantes celebren con orgullo unos días en los que se convierten en una localidad participativa y protagonista. Un momento que ellos mismos señalan como unas «jornadas que fueron cruciales en su historia».
Viaje a la Edad Media
La inauguracion del XXIV Mercado Medieval y Colombino llegó poco antes de media tarde. Decenas de puestos invadieron las calles centrales de la localidad para anunciar el evento. La oferta de pulseras, pendientes, jabones, cerámicas, telas y collares de piedras se fundieron con la mezcla de olores procedentes de los lugares en los que se vendían especias, aromas o incienso. Tampoco faltaron los tradicionales atuendos entre los mayores y las diademas de flores para las más pequeñas. Las vías se llenaron de viandantes durante toda la jornada, aunque algunos también pararon a hacer un descanso en las barras para demostrar que las fiestas habían empezado.
El alcalde de Santa Fe, Juan Cobo, destacó en el homenaje a Cristóbal Colón, que tuvo lugar junto a la estatua del municipio dedicada a este personaje, la importancia de su figura. «Cambió el destino de Europa, fue la semilla de una conexión con el atlántico», señaló. El acto sirvió también como un momento de encuentro con los Ayuntamientos de Palos de la Frontera y Baiona, municipios hermanados con la localidad granadina por su importancia en la historia del descubrimiento de América.
En palabras del primer edil de Santa Fe, «este día inauguró un capítulo esencial del devenir occidental».
Diversas actividades completaron una jornada que alcanzó su máximo esplendor con el desfile del Cortejo Real hasta llegar a la Plaza España y que posteriormente estuvo acompañado por la teatralizacion.
Los cuenta cuentos, las pasacalles, las exhibiciones de aves rapaces, combates de lucha un espectáculo de fuego, danza del vientre o bailes medievales. El objetivo principal fue mostrar la belleza una ciudad que se transforma durante unos días, así como su legado monumental y cultural que posee y la gran historia que hay tras sus 4 puertas. Entre las novedades este año, se celebrará la II Edición del Festival de Literatura Histórica, un acontecimiento que el año pasado tuvo una gran acogida.
Baile medieval
Los miembros de la asociación cultural y baile medieval del municipio expresaron su alegría por poder cumplir un año más con el baile tradicional en la plaza de España. Representaron con nerviosismo unos pasos que siguen desde hace 17 años y por los que destacaron la importancia de dar a conocer y extender sus atuendos. «Es una seña de identidad que marca la diferencia y que animamos a seguir a los asistentes. No hay nada más bonito que ver a los niños vestidos de medievales», señaló António, uno de sus miembros.
Los más jóvenes también aprovecharon la ocasión para invitar a sus amigos de otras ciudades a la singular celebración. Explicaron su historia. También la tradición familiar que muchos guardan detrás del evento. «Volvemos cada año de la ciudad en la que vivimos, nadie quiere perderse el ambiente» destacó Iván, uno de sus vecinos. Sorprendidos, improvisaron unas ropas típicas de la época o prometieron volver vestidos para la ocasión. Saben que el acontecimiento lo merece.
Hoy, sus vecinos disfrutarán de nuevo de una programación completa con una música y un ambiente que los hace sentirse partícipes de otra época.
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