El 'gran almacén' de la mercancía sanitaria

Más allá del debate semántico sobre si todo esto que está pasando es una guerra o no es una guerra, lo cierto es que en este combate a cara de perro contra el bicho hay profesionales que están en primera línea, tratando directamente a los enfermos o a los sospechosos de serlo, y los que están en la retaguardia y que desempeñan una función básica: proveer a los sanitarios de todo el material que necesitan para desarrollar su trabajo con plenas garantías de seguridad. De ello se encarga la Plataforma Logística Sanitaria de Granada, una nave de dos mil metros cuadrados ubicada en el polígono industrial de Juncaril que no cierra durante los 365 días del año y desde la que se distribuye todo el material a todos los hospitales y centros de salud de la provincia.

Unas instalaciones donde sus 130 trabajadores, sesenta en este edificio y setenta en las oficinas de gobierno del Virgen de las Nieves, trabajan al doscientos por cien desde que se declaró la pandemia. Para que se hagan una idea. Desde esta Plataforma se repartían, cuando el mundo era normal, una media de dos millones de guantes mensuales. Esta cifra ha subido hasta los cinco millones y medio. Posiblemente se trata de una variable poco científica, pero sí nos da una idea de cómo se incrementó la demanda en las urgencias en la fase crítica: se multiplicó casi por tres.

Aunque la labor de suministro implica una intendencia que comprende básicamente la recepción, selección y reparto de la mercancía, una tarea que hay que llevarla al día porque las necesidades son perentorias, la Plataforma tiene que funcionar también en clave de corto y medio plazo. La cadena de almacenaje nunca puede romperse. ¿Y qué pasó en las primeras semanas de caos? Pues que se rompió por desabastecimiento de los mercados primarios. Y aquí vino el problema. Un problema que sufrió Granada y en general toda España, con 44.000 médicos y enfermeros infectados en todo el país y, lo que es más terrible, casi ochenta muertes. Entre ellas, la de un granadino, José Manuel Fernández, médico de familia del Servicio de Urgencias de Atención Primaria del ambulatorio de Gran Capitán..

Esta deficiencia, que parece que se ha ido resolviendo en la medida que se ha normalizado el aprovisionamiento internacional, se ha suplido con el enorme ejercicio de solidaridad por parte de los ciudadanos. «Quiero aprovechar para trasladar mi agradecimiento más sincero», dice la directora de la Plataforma, Teresa Gasso, quien estima que se han producido más de doscientas donaciones por parte de colectivos ciudadanos, empresas, asociaciones y particulares. «Además –agrega– con unos elevados estándares de aptitud, empleando los tejidos adecuados y los patrones adecuados». «No sólo se ha hecho mucho, sino que además se ha hecho bien», recalca Teresa Gasso, quien comenta que en estos momentos, con todo lo que hay disponible en las estanterías de la Plataforma, hay suficiente para atender los requerimientos del presente, «pero siempre con la vista puesta en el futuro, en que mantengamos este estocaje a cinco, seis, siete, ocho… días vista».

Este 'invento' de la Plataforma Logística Sanitaria fue 'patentado' por la Delegación de Salud de Granada en el año 2005. En ese momento su acción se limitaba al Virgen de las Nieves, clínico San Cecilio y los distritos sanitarios Metropolitano y Jaén Sur. Pero, a raíz de los buenos resultados obtenidos en Granada, la Junta extrapoló esta idea a las ocho provincias de la comunidad autónoma de Andalucía en 2010. Su funcionamiento se asimila bastante al de una 'central de compras'. Es decir, se adquieren grandes cantidades del mismo producto para toda Andalucía y, siguiendo esa estrategia de economía de escala, se obtienen unos precios más baratos.

Desde aquí se gestiona todo: los procedimientos que, por volumen, requieren una tramitación más compleja según la ley contratos, y también los más sencillos. Una vez en la Plataforma, se desarrolla toda la intendencia. El grado de informatización y mecanización es alto. Para el transporte dispone de tres furgonetas con una capacidad de carga de hasta 12.000 kilogramos y un vehículo frigorífico para aquellas referencias que deben de conservarse en frío. Con esta flotilla se da cobertura geográfica a la capital. El servicio a mayor distancia lo presta ya una subcontrata de esta Plataforma.

Las puertas de la Plataforma están abiertas las veinticuatro horas del día durante los 365 días de año. De lunes a viernes, la faena se distribuye en tres turnos. Los fines de semana también están cubiertos con personal de guardia. La operativa es sencilla. Por la mañana se recepcionan todas las partidas y se colocan en los espacios de almacenamiento. ¿De qué material hablamos? Pues hablamos de material de cura, punción, higiene, prótesis, reactivos, laboratorio y limpieza.

También todo ese equipamiento imprescindible para protegerse contra el coronavirus. Es decir, guantes, gafas, pantallas, mascarillas y trajes EPI. A todo eso hay que sumar los medicamentos más comunes y que tienen una mayor salida (paracetamol, amoxicilina…), cuya manipulación en Plataforma está robotizada, y la gestión del resto de fármacos más específicos, aunque físicamente son los servicios de farmacia de cada centro quien los almacena. Por la mañana se recibe todo esto. También se distribuyen todos los pedidos que se preparan durante la tarde y la noche.