Un encierro políticamente correcto y conectado

Ahora tienen todos algo en común: un encierro en constante comunicación con el exterior para dirigir la vida pública desde sus hogares. Los políticos granadinos cuentan a qué dedican el tiempo libre, ese que sobra tras las llamadas –también vídeo– para tomar medidas en esta crisis que los mantiene aislados y siempre conectados.

Un compatriota fuera con problemas, una alerta en una residencia que pide la ayuda de la UME... la granadina Sandra García se pone a trabajar ante estas incidencias. La Delegada del Gobierno en Andalucía está en Sevilla con una videconferencia diaria –a las 12– para coordinar con la Junta, la Policía o el Ejército. Sus hijas están en Granada pero de ella no sale ni una sola queja; aunque sea duro. Su gran responsabilidad la mantiene con plena actividad.

El alcalde de la ciudad, Luis Salvador, tiene su mando de operaciones en el Ayuntamiento. Desde allí se encarga de coordinar la organización de la ciudad y visita a los colectivos que siguen funcionando o recibe, saludando con el codo, a los dispositivos militares, por ejemplo, que llegan para colaborar. Esté donde esté a las ocho de la tarde, es sagrado el aplauso a los sanitarios y a todos los «héroes» que luchan contra el coronavirus.

La consejera de Fomento, Marifrán Carazo, trabaja estos días desde casa, en Granada, desde donde organiza las medidas que van a los consejos de gobierno y el área de Transportes, que se ha adaptado a esta dura situación. Como está en su tierra, también está muy pendiente de la delegación granadina de la Junta y saca tiempo para afanarse en los deberes del cole de sus dos niños, para hacer algo de deporte o sorprender con alguna receta.

La subdelegada del Gobierno en Granada, Inmaculada López Calahorro, cuenta que los primeros días del estado de alarma fueron muy duros porque todo eran urgencias que resolver. Ella va a la a sede de la Subdelegación a pie y allí tiene reuniones a distancia o por videoconferencia. Se coordina con las fuerzas y cuerpos de seguridad y ha tenido que resolver situaciones y crear equipos para ello. Cuando regresa a casa les pide a sus familiares que no se acerquen mucho a ella por si acaso, se pone música para relajarse (tarde, ya por la noche) y abre el Facebook para compartir cosas positivas y solidarias dentro de lo malo. A los agresivos, no les responde. Entiende que estos días hay que tener esperanza.

La provincia de Granada la forman 174 municipios y 6 ELAS por lo que el presidente de la Diputación, José Entrena, está pendiente estos días de 180 alcaldes y de sus necesidades. Trabaja desde casa y controla que los servicios públicos como la ayuda a domicilio o el de extinción de incendios funcionen como siempre. Se pone al día con los medios de comunicación y las redes sociales.

Pablo García, el delegado del Gobierno andaluz en Granada, vive días complicados en su tarea de coordinar la delegaciones provinciales. Entre sus cometidos está el de procurar que el material de protección llegue a los hospitales o las residencias de mayores. García se pone en la piel de los sanitarios y manda un mensaje de comprensión para las familias de los contagiados y los fallecidos, que son los grandes sufridores de esta pandemia.

El diputado del PSOE en el Congreso, José Antonio Rodríguez Salas, cuenta que se dejó barba cuando comenzó el estado de alarma para explicarle a su hija Martina (4 años) que ahora son náufragos y viven en una isla desierta para que lo entienda como un juego. José Antonio está ahora en Jun, desde donde apoya al equipo del presidente, Pedro Sánchez, o al ministro de Sanidad, y ateniendo a cientos de granadinos a los que responde huyendo de los bulos y con informaciones veraces.

El diputado del PP Carlos Rojas está en casa, en Motril, desde donde continúa con su actividad parlamentaria y coordinando las áreas de las que se encarga. Además, atiende asuntos de la provincia y se comunica con sanitarios de su entorno más cercano para darles ánimos, algo que recalca todos los días con el aplauso de las ocho. En lo personal, hace ejercicio y se encarga de preparar el desayuno y también el almuerzo, porque le gusta mucho meterse en la cocina. Con su hija Érika (5 años) se pone todos los días a leer y en soledad, grandes clásicos como 'Guerra y Paz' y 'El Quijote'.

El teniente de alcalde de Seguridad y Movilidad del Ayuntamiento de Granada, César Díaz, funciona estos días a golpe de videoconferencia. Esta en casa y el teléfono echa humo hablando con los Bomberos. También coordina el dispositivo de seguridad con la Policía Local o se encarga de reestructurar la movilidad de la ciudad y los autobuses ante estos tiempos sin viajeros. Además, habla con Protección Civil sobre el reparto de alimentos a los más necesitados. Es imposible parar. Una llamada tras otra, la ciudad requiere organizarse ante el coronavirus.

El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, Paco Cuenca, sabe que es momento de propuestas positivas. Por eso, con sus concejales ha creado un grupo de whatsapp en el que buscan soluciones inmediatas a problemas de los granadinos. Aquel al que le preocupa su situación laboral, a la familia que no le llegan los alimentos... toda carencia que detectan la trasladan a quien corresponda. También se ha organizado para dedicarle tiempo a entidades solidarias y entregar mascarillas o buscar materiales para realizar trajes de protección. Además se mete en la cocina para mejorar su técnica y hace deporte junto a sus hijos Maya y Curro. Cada uno a su ritmo, él prefiere la bicicleta estática y 'moverse' en otros ámbitos.

El parlamentario andaluz de Adelante Andalucía, Jesús Fernández, pone en el centro de su tiempo, ahora, la vida de las personas. El teléfono le dura la batería muy pocas horas porque concejales y alcaldes le piden asesoramiento y en la Junta su grupo presentado una batería de propuestas en positivo. Jesús Fernández ayuda a los sindicatos con la difusión de estos asesoramientos. Vive en una casa con espacio exterior y se siente afortunado y piensa en quien no lo tiene y se prohíbe quejarse de su situación. Está haciendo un puzzle de mil piezas.

Antonio Cambril, portavoz de Podemos, IU, e independientes, en el Ayuntamiento define sus días con gracia pese a lo trágico de estos momentos. Le encanta leer, comer de cuchara y, de vez en cuando, genera alguna polémica y la «lía parda» con algún comentario en el Facebook. Sobre todo dedica su día a estar en contacto con sus concejales, sindicatos, colectivos y ayudar a los granadinos que sufren necesidades en tiempos de pandemia.

El portavoz de Vox en el Ayuntamiento, Onofre Miralles, explica que estos días tiene tiempo de pensar que España se había convertido en un país «sin valores sociales» y es momento de «recuperarlo». En cuanto a su actividad municipal, su grupo ha presentado más de 70 preguntas e iniciativas para velar por seguridad vecinos, funcionarios, policía y prever ayudas a las familias, comerciantes, hosteleros y autónomos. Además han planteado la supresión de gastos innecesarios y los de los grupos municipales y sindicatos para invertir ese dinero en los granadinos.