De una cochera de Granada a surtir a todo el mundo agrario

Quien vive y se dedica a trabajar el campo y necesita herramientas sabe valorar muy bien tener una nave cerca para poder comprar cualquier objeto que necesita. La zona norte de la provincia, con inmensas superficies agrícolas, requiere de esas pequeñas necesidades y también de gestiones de mayores dimensiones. Si ahora es complicado, en la década de los noventa del siglo pasado lo era aún más. Un trozo de manguera, unos tornillos, una azada, pala o un conector que es el día a día de los agricultores no era fácil encontrarlos sin tener que hacer kilómetros. Y mucho menos instalaciones de mayores dimensiones. Por eso, Joaquín Moreno dio el paso. Con la ayuda de sus padres Rufina y Gabriel en el año 1992 fundó Comercial Moreno. En un inicio el negocio estaba ubicado en Valcabra, que es un anejo de Caniles. Actualmente están en el polígono industrial de la localidad.

El comienzo fue en una pequeña cochera donde vendía gomas para el riego de las superficies agrícolas. La familia Moreno se dedicaba a la cosecha de habichuelas, tomates y otras hortalizas. Sabían muy bien qué necesidades tenían los agricultores de la comarca. Pasaron los años y la familia decidió que era el momento de ampliar el negocio. Joaquín Moreno compró una finca para hacer una nave más grande. Por esa época solo tenía cuatro empleados. Según iba aumentando el volumen de venta fue agrandando las instalaciones e incorporando más personal. Actualmente en la empresa hay 14 trabajadores. Un número destacado para la zona geográfica en la que operan. Si bien su mercado se fue ampliando y superando las lindes de la propia comarca para llegar incluso a provincias colindantes.

Fueron ampliando la oferta y sus ventas de productos. Introdujeron todo lo relacionado con el agua, fontanería, baños, piscinas, saneamiento, maquinaria para la agricultura, calefacción, aires, entre otros productos y servicios. Así llegaron a ser una empresa referente en la comarca, ampliando sus ventas al conjunto de la provincia granadina, Almería y Jaén.

La evolución en cuanto a infraestructura fue poco a poco. Con contratiempos importantes, como el de febrero de 2018, cuando se produjo un incendio, donde todo, absolutamente todo, acabó en cenizas. «Ver como todo el trabajo de una vida se esfuma sin poder hacer nada es una de las peores cosas que le puede pasar a un empresario. Pero no sabíamos lo que venía después, aún peor, porque no hay nada que sustituya una vida», recuerda Eli Ruiz, hermana de Piedad y cuñada de Joaquín. El empresario enfermó, y tras un duro proceso de lucha falleció el 4 de enero de 2019. «Eso sí, él luchó hasta su último aliento, ya que dejó todo preparado para levantar su negocio de nuevo», apostilla.

Piedad, la esposa de Joaquín, y sus hijas, Alicia y Cristina, se pusieron al frente de la empresa que tanto había costado levantar a Joaquín y a la que tanto tiempo dedicó. Actualmente también está en la empresa Eli Ruiz hermana de Piedad y cuñada de Joaquín, y Juan Manuel Mesas, cuñado de Piedad y Joaquín.

«Para nosotras seguir con un negocio familiar, es un orgullo ya que están puestas todas las ilusiones de Joaquín y ya las nuestras. Estamos trabajando con mucho esfuerzo para que continúe su legado», destacan la esposa e hijas. «La vida hay veces que nos pone pruebas, pero esta es una de lucha, esperanza y como no el renacer de las cenizas. Ya que con todo el dolor su mujer Piedad Ruiz y sus hijas Cristina y Alicia, decidieron seguir con el legado de su padre y esposo», ensalza Eli Ruiz.

Piedad, Alicia y Cristina son mujeres valientes, y no se lo pensaron ni un instante. Tenían una ardua tarea, ya que cuando ya tenían alquilada una nave para empezar a trabajar mientras se construían las nuevas instalaciones, llegó la covid. Fueron tiempos de confusión y miedo para todos y ellas además con la empresa por levantar de nuevo, pero no miraron atrás, y siguieron con esa fuerza que las caracteriza. Ya en las nuevas instalaciones siguen hacia delante con más productos y dando respuesta a todos sus clientes. Están muy agradecidas a todos sus clientes que han seguido apoyándolos y contando con ellos.

«Sinceramente nos encontramos arropados después de tanto. También tenemos que agradecer a los proveedores que han seguido confiando en nosotras», subrayaron los propietarios.

El esfuerzo y trabajo en continuo. No descuidan ningún detalle y están al tanto de ir adaptándose al mercado y estar al día en lo referente a innovación y tecnología. «Queda mucho trabajo por hacer, pero aquí seguiremos luchado», avanzan.

Comercial Moreno sigue surtiendo a sus vecinos y también ampliando su mercado. Lo hacen con mucho esfuerzo. Quieren que sus clientes puedan encontrar desde un tornillo a una gran cantidad de mangueras o salir de allí con la contratación de una fontanería, piscinas, maquinaria para la agricultura, calefacción o aires acondicionados.

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