Una historia de amistad internacional en la Media
Media Maratón Ciudad de Granada ·
El granadino Ernesto y seis colegas de tres países diferentes participan en la prueba motivados por la belleza de su recorrido
Ernesto Wulff Olea nació en Granada aunque, por designios de la vida, solo ha vivido un año en la ciudad. Su cariño por esta tierra es, no obstante, más fuerte si acaso que si residiera de forma habitual. En 2019 corrió la Media Maratón y, prendado, no pudo dejar de compartirla con sus seres queridos. Menos de un año después, la pandemia le sorprendió durante un viaje a Lituania para visitar a su amigo italiano Simone. «Me ofreció quedarme con él durante el confinamiento y estuvimos juntos cuatro meses hasta que pude volver a Granada al abrirse las fronteras», cuenta. Durante aquellos días, este ingeniero informático compartía sentidas charlas con amigos que tiene repartidos por el mundo sobre las maravillas de sus respectivas ciudades. «Les hablé de la Media y quedamos en que se apuntarían si se volvía a hacer cuando la pandemia terminase», rememora. Y, de alguna forma, la pandemia terminó para ellos este sábado.
Junto al granadino Ernesto Wulff y el italiano Simone corrieron sus amigos alemanes Stephan y Sophia, la francesa Maya y los sirios Owayss y Sandra. A todos les gusta correr, aunque solo como meros aficionados al deporte popular, y volaron desde sus respectivos países habiendo entrenado allí. Se encontraron en Málaga y alquilaron un apartamento en Granada. «Hay más de uno que incluso ha aprendido un poco de español solo por la carrera», desvelan, divertidos.
Antes de dividirse entre los que corrían la prueba reina de 21 kilómetros con salida en el Palacio de Congresos y los que hicieron el 1/4 de Maratón, se hicieron una fotografía todos juntos ante la Catedral en la Plaza de las Pasiegas. A continuación, se desearon suerte. La iban a necesitar con todos los kilómetros que tenían por delante. En cualquier caso, sea por la belleza o por la dureza, seguro que ninguno lo olvidará y, ante todo, y más que de la Alhambra o del Albaicín, se acordarán de lo buenos amigos que son.
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