Borrar
Stepan Topor, jugador de baloncesto de 17 años que juega en el CB Armilla, posa junto a la residencia Yugo Granada Salud, en la que vive desde hace meses. Pepe Marín

Superación en el baloncesto

De la guerra en Ucrania al aro en Granada

Stepan Topor es un chico de 17 años que llegó a España con la ambición de triunfar en el deporte con una historia de sufrimiento detrás

Fran Peláez

Granada

Sábado, 24 de mayo 2025

Comenta

Valiente, talentoso y humano. Son los tres adjetivos que definen a Stepan Topor, un ucraniano de 17 años que llegó a Granada con la ambición de triunfar jugando al baloncesto y con una historia de sufrimiento por una guerra que ahora reescribe bajo los focos de un pabellón granadino.

A finales de octubre, Stepan aterrizó en la capital de la Alhambra. A pesar de las dificultades para viajar, ya que los aeropuertos ucranianos están cerrados, Topor recorrió junto a su madre 1.341 kilómetros en autobús desde Jarkov, su ciudad, hasta Cracovia (Polonia) para poder coger el vuelo que lo trajo directo a España. Una beca financiada por la empresa Merkel Capital es el principal motivo por el que este joven ucraniano puede estar viviendo en Granada en la residencia de estudiantes Yugo Granada Salud.

Stepan, acompañado de su tutora y a veces traductora, Ana Vílchez; de su entrenador en el Club Baloncesto Armilla, Antonio Fernández 'Melo'; y de Antonio López Bustos, vicepresidente en Europa Continental Yugo, rescata cuáles fueron sus primeras impresiones. «Cuando llegué lo que más me sorprendió fueron las montañas. Esto es muy diferente a lo que hay en mi país. El clima también me encantó aunque ahora estoy pasando bastante calor», apunta Stepan, hablando constantemente en un castellano bastante fluido para el tiempo que lleva en el país.

El idioma no supone un problema para el joven ucraniano. En octubre llegó al país sin conocer el castellano y siete meses después puede mantener una conversación fluida utilizando, en algunas ocasiones, un traductor online que le ayuda a comprender algunas palabras o expresiones que aún se le escapan.

Vivir solo y lejos de su familia es algo que a cualquier joven de su edad le costaría horrores. Topor, acostumbrado a mantenerse sin los suyos tras estar dos años residiendo en otra ciudad de Ucrania, afrontó su llegada a Granada como una nueva oportunidad para conocer personas ya que, según relata, es, junto al baloncesto, lo que más le apasiona.

A Topor le tocó pasar momentos que ninguna persona, y mucho menos un niño, debería sufrir. Desde la distancia, Stepan reconoce seguir intranquilo, y más teniendo a su familia en su país. «Todos los días leo noticias de Ucrania sobre bombas, mi ciudad está llena de drones. Veo vídeos muy malos y mi familia está en un lugar muy cerca de Rusia», narra mientras se muestra emocionado.

Su pasión por el baloncesto nunca desapareció, ni en los peores momentos. Topor jugó en varios equipos desde bien pequeño. Durante el conflicto armado, tuvo que irse a Letonia durante tres meses para jugar con un equipo de compatriotas en una liga local, en la que salieron campeones.

Por otro lado, Stepan tiene experiencia en torneos internacionales, ya que representó a Ucrania en un torneo satélite de 3x3 durante los Juegos Olímpicos de París.

Inicios en Armilla

Al llegar a España, comenzó a participar en la disciplina del equipo júnior del CB Armilla jugando como alero. No tardó en destacar y llamar la atención de Antonio 'Melo', entrenador del equipo sénior, quien decidió que debía entrar en la disciplina del primer equipo en una temporada histórica en la que el conjunto granadino va a disputar el 'play off' para ascender a la Segunda FEB, la tercera división del baloncesto español, tras ascender a su vez la temporada anterior.

Para Topor no resulta difícil jugar con mayores. «No tengo problema, en Ucrania jugaba contra chicos con uno o dos años más», afirma el joven.

El baloncesto es su vida y así lo demuestra hablando de su sueño. «Me encantaría convertirme en jugador profesional y poder vivir del baloncesto. Mis equipos favoritos son el Partizán y el Estrella Roja», cuenta Stepan con aparente ilusión, además de asentir que le gustaría volver a representar a su país en unas competiciones de 3x3 que se jugarán en 2027 en Dakar (Senegal).

La residencia Yugo, situada en Armilla, es el lugar donde vive gracias a una beca. «Aquí tengo todo lo que necesito. En la residencia hay buena comida, puedo comer la proteína que necesito. También hay buenas instalaciones y puedo entrenar cuando quiera. Los trabajadores son cercanos», resalta Stepan, con ilusión de seguir más tiempo en Granada.

Visita esperada

El 23 de junio, Stepan recibirá una visita muy especial. Su madre, quien ya lo acompañó cuando llegó en octubre, y su hermano de ocho años se desplazarán tras ocho meses sin verse. Este momento será muy especial para Topor ya que, a pesar de estar cómodo y feliz en España, no hay día que no añore a sus familiares, sobre todo a su hermano, quien cogerá un avión por primera vez.

Su historia es un ejemplo inspirador de resiliencia, adaptación y esperanza. Desde una Ucrania devastada por la guerra hasta una nueva vida en Granada marcada por el esfuerzo, el talento y la ilusión, este joven demuestra que los sueños pueden florecer incluso en los contextos más adversos. Su pasión por el baloncesto y su determinación lo han llevado a integrarse en una nueva cultura y a destacar en un deporte que le ofrece no solo una vía profesional, sino también un refugio emocional. Stepan no solo representa a quienes huyen de la guerra, sino a quienes luchan por construir un futuro mejor.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

ideal De la guerra en Ucrania al aro en Granada

De la guerra en Ucrania al aro en Granada