El granadino que pasó de Harry Potter a Westworld

Francisco Martos (Granada, 1993) y sus hermanas creían que era verdad, que en Los Ángeles había gente con poderes. Con poderes mágicos, como las protagonistas de 'Embrujadas'. «De niño estaba convencido –ríe, al teléfono–, ¡nos encantaba ver esa serie!». Luego alguien rompió el hechizo y le habló de los cromas, de los efectos especiales, de la magia de la edición... Y entonces surgió otra pasión: el cine. «Harry Potter me marcó mucho. Íbamos al campo y nos construíamos escobas de quidditch con palos que barnizábamos. Me gustaba tanto, que cuando mi padre compró una cámara me propuse hacer mi propia versión de la película. Grabé dos escenas y poco más –ríe otra vez, con cierta melancolía–... pero ahí empezó mi curiosidad. Ahí nació la magia».

Veinte años después de aquel intento por convertir su dormitorio en el colegio Hogwarts y a él mismo en un mago de leyenda, Martos aparece tumbado en una camilla, semidesnudo, con los ojos cerrados y la cabeza abierta por la sien, como si fuera una lata de conservas. A su lado están Tessa Thompson ('Thor: Ragnarok') y Ed Harris ('La roca'), observando con atención lo más profundo de su cerebro. «¡Corten!», grita el director. Francisco se incorpora y observa con atención los focos, las cámaras y el enorme equipo de profesionales que le rodea. «¡Estoy en 'Westworld' (HBO)! Es increíble estar dentro de una gran producción de Hollywood. Ha sido una experiencia alucinante».

Martos vive en Los Ángeles desde hace tres años, pero él se siente, por encima de todo, «granaíno». Aunque ahora está forjando una carrera como actor, lo cierto es que su historia empezó por otros derroteros. «Estudié Optometría en la Universidad de Granada. No sabía qué hacer y, como mi madre tiene una óptica en Santa Fe, me empujó un poco. No me arrepiento. Con 18 años era joven para perseguir este sueño, ahora tengo más claro que quiero dedicarme al 'acting'. Además, los 'skills' de la carrera siempre estarán ahí».

–¿'Acting'? ¿'Skills'? ¿Pero no era «granaíno»?

–¡Ya! –ríe a carcajadas–. A veces hablo con mi madre y me dice que qué me pasa en la boca. No sé, es que cuando te pasas todo el día en inglés te termina saliendo un 'espanglish' raro. Es que cambia el chip en la cabeza y a veces me salen palabras en inglés antes que en español. Nos pasa mucho a los que venimos a vivir aquí.

«Con 14 años –recuerda Martos– siempre grababa vídeos con mi hermana. Y era algo que quería hacer más profesional. Siempre te dicen que el 'acting' no tiene futuro... Pero yo quería probar». Tras estudiar Optometría en la UGR y Biología en Barcelona, pasó una temporada en Fuerteventura, trabajando, donde también descubrió el surf. «Con el dinero que ahorré, me fui a hacer un curso a Los Ángeles, a la UCLA». En los primeros seis meses realizó decenas de castings y consiguió aparecer varios cortos y campañas publicitarias.

Aquel arranque en el mundo de la interpretación abrió un camino que le llevaría a protagonizar los videoclips 'All your days', de Shallou; y 'Say It', de DVBBS, que suman más de medio millón de reproducciones en Youtube. Al poco, Martos consiguió el papel protagonista del corto 'Clear Water', con el que logró cuatro nominaciones y cuatro premios internacionales. Y se ha convertido, además, en la imagen de marcas como Cheetos, Bosh, LG, Paypal y Heinz. «¡Y salgo en 'Westworld'! Soy un secundario, en el episodio 7 de la cuarta temporada, que todavía no se ha estrenado».

–¿Era fan de la serie?

–Lo cierto es que no la he visto todavía (ríe). Es que tengo una rutina muy intensa y no paro. Aunque mi plan es ponerme al día antes de que salga yo.

En este tiempo en Los Ángeles, Martos ha participado en dos películas independientes: 'Bloody Famous', de Steve Balderson; y '6.15 am to 6.15 pm', de Carl Bessai y Deborah Maxwell Dion. «Mi próximo trabajo será en 'The Fear 3', con el papel principal. Es una película de terror, un thriller en el que si los personajes no superan sus miedos, mueren. Hago el rol de DJ español, creo que será un papel interesante».

El gran sueño, dice el granadino, es «hacer películas y vivir de esto». Pero claro, si pudiera elegir formar parte de cualquier rodaje, lo tiene muy claro: «Mi sueño es estar en una de James Bond o hacer 'Misión Imposible'. Me encantan las películas de acción y también los thrillers profundos, tipo 'El silencio de los corderos'. Jodie Foster es la mejor». Con todo, Martos cree la experiencia en Los Ángeles le está ayudando, sobre todo, a conocerse mejor. «Me vine solo. Y la búsqueda del sueño, al principio, fue bastante dura. Ahora he encontrado una pequeña comunidad, pero la vida aquí es bastante solitaria. Todo el mundo tiene prisa, no hay la calidad de vida de España. Pero creo que no hay que rendirse antes de empezar. A mí esto me parecía un camino muy difícil, pero de verdad que pienso que todo se puede conseguir. A todo el que quiera seguir un camino así, que sepa que nada es imposible, aunque todo tiene un precio. Esa es mi motivación».

Martos volverá a España este verano, para participar en un festival, en Madrid. «Creo que estoy recogiendo lo sembrado –termina–. Esto empieza a funcionar. ¿El objetivo?Ser capaz de vivir y trabajar entre Los Ángeles y España. Eso sería... 'like' mágico».

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