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Exploraciones arqueológicas en el Castillo de Tabernas. R. I.
Cultura en Almería | Patrimonio histórico | La joya almohade oculta más de medio siglo

La joya almohade oculta casi medio siglo

Descubrimiento en la Alcazaba de Tabernas ·

El descubrimiento, llevado a cabo por el equipo de arqueólogos de Memolab, es el primer hallazgo de los muchos que, se espera, van a producirse durante los próximos meses

David Roth

Tabernas

Viernes, 19 de marzo 2021, 23:54

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Como un oasis en el desierto, un aljibe ha hecho acto de aparición durante los sondeos arqueológicos que el equipo de Memolab, dirigido por José María Martín Civantos, estaba realizando sobre la Alcazaba de Tabernas en la primera fase de una serie de intervenciones que se van a producir sobre la fortaleza. En concreto, las distintas acometidas se realizarán en cuatro distintas fases que acabarán con la musealización, tanto de la fortificación como del aljibe.

El castillo es de origen almohade, aunque se sabe que tuvo mayor ocupación en época nazarí. Su función principal era la del control del territorio y de las vías de comunicación naturales que llevaban hacia la capital. Más tarde, en época castellana, a finales del siglo XV e inicios del XVI, cuando se acomete la última reforma de la alcazaba antes de su abandono, la labor ya cambia y se reorienta al control de la población morisca, vencida en la Guerra de Granada y que posteriormente se levantaría en la Guerra de las Alpujarras.

El proyecto en su fase 1, etapa en la que se encuentra actualmente, consiste en obtener más datos sobre el castillo en una serie de sondeos arqueológicos. De hecho, la existencia del aljibe se conocía previamente, puesto que se tiene constancia de que se colmató en los años ochenta, es decir, se tapó con tierra por motivos de seguridad, pero no se sabía con exactitud su localización, por lo que cayó en el olvido.

Dentro de la planificación se decidió centrar los esfuerzos en sacar el aljibe a la luz, un elemento básico para el abastecimiento de agua de las guarniciones militares que defendían Tabernas.

El director arqueólogo del proyecto, Rocco Corselli, precisaba que habían encontrado el espacio «haciendo una intervención exterior a lo largo de la muralla», donde encontraron «una esquina del aljibe». En la parte oeste se produjo una reforma en la que se reconstruyó la torre y la entrada que da a Tabernas a finales de los 70 y otra en el muro que da a Almería.

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Es durante una de estas obras cuando se decide tapar el aljibe por motivos de seguridad y porque se usaba con asiduidad como basurero. «Le pusieron encima un tapón de madera y le echaron tierra y por eso lo hemos encontrado por debajo de los niveles contemporáneos», profundizó el arqueólogo.

El objetivo de los sondeos era conocer la estratigrafía, los niveles más antiguos de ocupación y, en definitiva, saber un poco la historia que hay detrás. Según Corselli, han «decidido realizar este planteamiento en esta zona en concreto» debido a que vieron «que estaba cubierta por niveles contemporáneos». Queríamos conocer si el aljibe estaba lleno de tierra, el estado de la bóveda y también sabíamos que no había que invertir mucho esfuerzo al estar el exterior de la bóveda un metro de los niveles de uso actual».

Cuatro fases

Alfonso Heredia, concejal de Turismo y Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de Tabernas, explicó a IDEAL que el interés municipal «era sacar el aljibe y ver su estado de conservación, que es muy bueno tanto el interior como el exterior». La bóveda se conserva a la perfección, por lo que ahora se va a proceder a su consolidación, a su intervención y a su futura interpretación. «Ahora mismo nos encontramos en la primera fase, pero ya se ha aprobado desde el Ministerio de [Transportes] la fase dos, que arrastrará consigo una serie de sondeos arqueológicos en otros puntos que esperamos que nos den este tipo de sorpresas y sirvan para interpretar el castillo en su práctica totalidad» apuntó.

Esta primera fase trata de la consolidación de estructuras que estaban en peligro de desaparición y para evitar el derrumbe de estructuras que puedan causar algún daño al visitante.

La segunda fase incluirá aspectos para hacer seguro y accesible el aljibe, puesto que ahora mismo no cumple con las condiciones necesarias para ser interpretativo. Persigue los mismos objetivos que la primera, pero con otras estructuras y torres, con actuaciones más enfocadas en la planta de la fortaleza que en el perímetro. La tercera y la cuarta son las que se encargarán de musealizar los restos arqueológicos y del yacimiento, una vez esté ya consolidado por las fases previas.

Sin embargo, las fases pueden cambiar sobre la marcha en caso de que se encuentren nuevas sorpresas durante los próximos sondeos y limpiezas. Además, se presume que este aljibe no es el único que se encuentra oculto bajo los suelos de la fortaleza. Hablamos de una estructura en torno a los 23.000 metros cuadrados, por lo que era imposible abastecer a las tropas que resguardaban sus muros únicamente con el que se acaba de encontrar, puesto que no tiene el tamaño necesario para ello. De igual forma, el equipo de arqueólogos que están realizando los distintos trabajos de excavaciones y adecuación en base a una serie de elementos, como la presencia de fosas de expolio, creen haber encontrado otro aljibe que hasta ahora había pasado desapercibido para todos.

A esto, Heredia apuntó que este segundo aljibe «aparece muy vagamente» en las limpiezas arqueológicas que se han hecho recientemente. «Pero todo apunta a que sí, que hay otro y que el descubrimiento de este tipo de estructuras no ha hecho más que empezar». Se cree que, por los plazos administrativos, habrá un corto periodo de tiempo entre el final de la fase 1, que está previsto en junio, y el inicio de la fase 2, cuando ya arrancará la consolidación que, a la luz de la investigación de la fase 1, pondrá de manifiesto las distintas localizaciones donde haya que intervenir, como la fortificación castellana, el muro diafragma y la torre redonda.

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