En directo | Rayo Vallecano - UD Almería

El Almería ha demostrado tener recursos para 'encarar' la tormenta intensa que se avecina. El Rayo se comporta en casa con mucha solidez, sólo ha encajado un gol en su primera comparecencia, frente al Sabadell, y el potente Espanyol de los Raúl de Tomas o Embarba se quedó sin hacerlo y derrotado en un campo donde la UDA no ha sido capaz nunca de vencer en Liga –lo hizo en Copa, con los indálicos en Primera–. Recursos hay. Los dos 'equipos' puestos en liza por José Gomes cuando llegaron las victorias han sido capaces. Lo que hoy puede acontecer está sólo en poder el técnico, que ayer 'cerró las puertas' para entrenar y preparar el duelo. Se desconoce si tirará por los de antes –descansaron puede que con la intención de tenerlos frescos para un partido 'caliente'–, si lo hará por los que ganaron el jueves o si el once será una mezcla de lo visto en los tres escenarios últimos en los que se presentó saliendo indemne.

La UDA ha ganado ya más partidos a domicilio que en casa, algo que responde a la nueva normalidad. De las cuatro victorias, sólo una se celebró en el Juegos Mediterráneos. Precisamente, el once de aquella conquista llegó ante el rival más sólido al que pueda haberse enfrentado en casa, atendiendo a lo exhibido por el rival, el Fuenlabrada, hasta llegar a Almería. Único invicto, se encontró con un José Corpas espectacular, pero 'ayudado' por un equipo que exhibió sus mejores galas.

Aquel once que logró la que hasta ahora es la única victoria disfrutada en casa tiene visos de volver hoy, pero también jugadores como Ramazani dieron un golpe en la mesa, el jueves, para ganarse el respeto y su presencia en el once inicial al menos hoy. No será por cansancio, porque el belga sólo ha jugado un partido completo –el de la Nova Creu Alta–. Otros que pueden ser sacrificados del 'once habitual' han llegado a estar presentes en tres partidos en sólo una semana. Quiere esto decir que el autor intelectual del primer gol de la UDA en Sabadell y el autor material de la remontada podría tener sitio en el once de salida que se presenta esta tarde en Vallecas.

En ese aspecto, Fran Villalba podría ser el 'sacrificado', manteniendo a los otros diez que firmaron la conquista de seis puntos de forma consecutiva, tras apuntar al triunfo en casa la victoria en Castalia, superando el trance de un partido que en sus minutos finales puede ser un escenario de estudio por la similitud con lo que el Rayo intente plantear el envite de hoy.

Lo cierto es que lo sucedido en Sabadell da también para pensar si habrá algún cambio más. Fernando dio una exhibición de seguridad bajo palos. Sobrio, como siempre, el equipo creció y ganó el partido después de que el meta murciano detuviera a Stoichkov el penalti cometido por Iván Balliu. No sonaría a sorpresa su continuidad.

De ahí en adelante, los laterales exigen la experiencia de jugadores como Iván Balliu y Sergio Akieme, que vuelve a la que fue su casa hasta que fue fichado por el FC Barcelona. Maras y Jorge Cuenca, que se concentrarán, como Makaridze, al término de la jornada con sus respectivas selecciones, formarían la pareja de centrales.

La salida de balón y el equilibrio es cosa de Manu Morlanes y Samú Costa, si bien es cierto que el centro del campo en Sabadell tampoco estuvo 'bajo mínimos'. Petrovic, por ejemplo, dio solidez y hasta profundidad. El gol anulado a Ramazani y el penalti de después nacieron de su visión de juego. Aunque sí es cierto que lo expuesto por el jugador cedido por el Villarreal y por el portugués es un aval del que no se debe prescindir hoy en Vallecas.

Las otras dudas se generan en torno a los de arriba, aunque no haya mucho 'en lo que elegir', no por número, sino por las prestaciones que han dado los que han ocupado esa posición durante el desarrollo de las nueve citas en las que ha competido el cuadro indálico. La única variación en esa parcela podría ser la presencia, como queda dicho, de Ramazani por el carril zurdo, con Joao Carvalho apareciendo por donde ha dado más al equipo, en la mediapunta, con José Corpas a su derecha y por detrás de un Umar Sadiq al que los goles le están dando la espalda, pero no su capacidad para ayudar al equipo y que este se persone como tal en cada partido. Tal y como dijo José Gomes a la conclusión del partido del pasado jueves, la victoria tiene que ver mucho con esa actuación de equipo. El nigeriano jugó más para sus compañeros que para él y por eso, quizá, vino el gol de la victoria.

La conquista será cuestión de hacer que el Rayo sea el que aparece a domicilio. En su campo, se siente sólido, fuerte. Es el único de la competición que ha ganado todos sus partidos en casa, con cuatro victorias sobre cuatro partidos y, más llamativo aún si se compara con lo hecho fuera, con sólo un gol en 360 minutos, con los últimos 339 con un 'cerrojo'.

Si el partido de ida y vuelta, sus opciones aumentan, planteárselo más cerrado porque da la sensación de que por dominar los partidos su planteamiento provoca un 'cuerpo a tierra'. Ganar hoy supondrá escalar como mínimo una posición porque el Rayo está dos puntos por encima y se le sobrepasaría. El último tropiezo frente al Lugo frenó en seco al Rayo, que ha pasado la semana viendo el liderato del Espanyol a siete puntos y al segundo clasificado, el Sporting de Gijón, a seis. Este encuentro es muy importante, pues las diferencias empiezan a ser notables con la zona alta. Pocos cambios se esperan. La principal duda reside en la punta de ataque, pues el franco-marroquí Yacine Qasmi y el argentino Leo Ulloa pelean por un puesto que en Lugo ocupó Antoñín, que en esta ocasión podría actuar de extremo.