Ariel C. Rojas
Domingo, 21 de septiembre 2025, 00:03
Irrumpió Antonio Orozco con ímpetu y voracidad de público a las nueve y media de la noche de este sábado. En el enorme escenario de una Plaza de Toros ansiosa por abrazar el cancionero del de Hospitalet de Llobregat dentro del ciclo 1001 Músicas. Ahí apareció él, engalanado de negro, con mucho brillibrilli. En el mismo escenario que hace justo un año conquistó su ídolo mayor: Manolo García. Tras una breve sintonía electrónica, el cantante catalán entró hablando de «sueño cumplido esta noche en Granada». Comenzó por su lado más filosófico, sin ser él mucho de eso, pregonando la reciente 'El tiempo no es oro'.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Te puede interesar