La huelga de hambre que el presidente de Bolivia, Evo Morales, inició hace cinco días podría acabar hoy. Ayer gobierno y oposición llegaron a un acuerdo sobre la ley electoral, razón por la que el presidente tomó esta medida. Una actitud que han secundado otras dos mil personas, y que mantendrán hasta que la ley sea aprobada y permita celebrar los comicios generales del próximo 6 de diciembre.