Una familia se reencuentr. EFE

Revelan cómo es el «abrazo ideal» para tener el menor riesgo posible de contraer coronavirus

Investigadores definen las situaciones idóneas de estas cosumbres en plena pandemia

ideal

Domingo, 14 de junio 2020, 09:54

Con la nueva normalidad a la vuelta de la esquina, las costumbres y usos sociales vuelven poco a poco a imponerse. En este punto ... figuran una de las más extendidas: los abrazos. ¿Existe alguna fórmula para abrazarse y a la vez no arriesgarse a un posible contagio?

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Linsey Marr, investigadora del Instituto Politécnico y Universidad Estatal de Virginia (EE UU), ha dado respuesta y asegura que el riesgo es bajo. Marr, una de las principales expertas mundiales en transmisión de enfermedades transmitidas por el aire, se basó en modelos matemáticos de un estudio realizado en Hong Kong que muestra cómo viajan los virus respiratorios durante el contacto cercano entre personas.

«No sabemos cuántos virus infecciosos se necesitan para enfermarse, probablemente más de uno. Si no habla ni tose mientras abraza, el riesgo debería ser muy bajo», indica a The New York Times.

Para dar un abrazo de forma segura, la experta recomienda: esar mascarilla, abrazarse al aire libre, intentar evitar tocar el cuerpo o la ropa de la otra persona con tu cara o su mascarilla son algunas de las recomendaciones.

El abrazo ideal por tanto, según Marr, será el que se den aquellas personas que «tienen mascarilla, miran para lados opuestos, no tosen ni se hablan mientras se abrazan». Además, «cuanto más rápido sea, mejor», añade.

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«Mantener los abrazos breves es particularmente importante porque el riesgo de transmisión aumenta con un contacto más prolongado», indica, por su parte, Julia Marcus, epidemióloga de enfermedades infecciosas y profesora asistente en la Facultad de Medicina de Harvard.

Marr habla también del caso de un abrazo entre niño y adulto. Sostiene que lo mejor es que se realice a la altura de la rodilla o la cintura, lo que «reduciría el riesgo de exposición directa a gotas y aerosoles porque las caras están muy separadas. Sin embargo, existe la posibilidad de que la cara y la mascarilla del menor contaminen la ropa del adulto». Por lo tanto, recomienda «cambiarse de ropa y lavarse las manos después de una visita que incluya abrazos. Además, el adulto también debe mirar hacia otro lado para no respirar sobre el niño«, apostilla.

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