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La Guardia Civil confirma que el cadáver encontrado es el de Laura Luelmo

Los agentes investigan si la joven profesora fue asesinada o sufrió un accidente en una zona abrupta tras salir a correr el pasado miércoles

Melchor Sáiz-Pardo

Madrid

Lunes, 17 de diciembre 2018, 15:45

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Una persona ha encontrado a las doce del mediodía de este lunes el cuerpo de una mujer joven en Zalamea la Real, un municipio onubense de poco más de 3.000 habitantes situado cuatro kilómetros al suroeste de El Campillo, donde desapareció Laura Luelmo Hernández el pasado miércoles por la tarde cuando salió a correr. La Guardia Civil ha confirmado que se trata del cuerpo de la profesora.

Según fuentes de la investigación, la primera identificación visual hecha por el equipo central de inspecciones oculares de la Guardia Civil, que se ha desplazado en helicóptero al lugar donde se ha hallado el cuerpo de una mujer, no deja lugar a dudas de que, efectivamente, se trata de la profesora de Zamora. También sus ropas coinciden.

Los agentes investigan ahora la posibilidad de que se trate de un asesinato, ya que la escarpada zona en la que se ha encontrado el cadáver (conocida como La Mimbrera) no es área en la que se pueda realizar running, la práctica deportiva que iba practicar la chica de 26 años cuando abandonó su domicilio a las 16:00 horas del pasado miércoles. Los funcionarios también mantienen abierta la hipótesis de que la chica muriera accidentalmente, al despeñarse, tras desorientarse. Su cuerpo ha aparecido en una zona muy abrupta, de difícil acceso, entre varios matorrales, aunque no muy lejos de la Nacional 345. Precisamente este área iba a ser batida hoy por los especialistas de la Guardia Civil y Protección Civil. Solo la autopsia, que se realizará en breve, despejará definitivamente las dudas de la causa de la muerte.

Laura Luelmo llegó hace solo unos días a El Campillo (2.000 habitantes, en la comarca minera de Huelva) procedente de Zamora. Se incorporó a dar clases como profesora interina de educación plástica el 4 de diciembre en el instituto de secundaria Francisco Vázquez Díaz, del vecino pueblo de Nerva.

Los investigadores recalcan que tenía una vida «totalmente estable», con una carrera profesional en ciernes, con una relación sentimental «igualmente estable» y sin problemas familiares ni sociales de ningún tipo. «Ni un solo motivo para desaparecer voluntariamente», insisten desde las Guardia Civil.

La última señal emitida de su móvil, sobre las 20:00 horas, fue detectada por una antena ubicada a nueve kilómetros al norte del pueblo, cuando una de las aplicaciones de su aparato, probablemente el Whatsapp, emitió por última vez. No obstante, el hecho de que se trate de una zona rural, con pocas antenas y en una zona bastante montañosa, ha dificultado a los especialistas determinar el lugar exacto en el que se encontraba el teléfono en esa última conexión.

El delegado del Gobierno en Andalucía, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, que ha informado del hallazgo del cuerpo, ha explicado que a la familia ya le han comunicado «toda la información» sobre el caso, y ha dicho que, aunque aún no está «certificada la identidad del cuerpo, todos los indicios así lo indican», en referencia a que podría tratarse de la joven zamorana.

Los mejores, al mando

El Ministerio del Interior decidió el sábado poner al frente de la investigación a los especialista de las Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, exactamente el mismo equipo que hace un año resolvió el caso de Diana Quer con la detención de su asesino, José Enrique Abuín, y el hallazgo de su cuerpo y que el pasado marzo consiguió encontrar el cadáver del niño Gabriel Cruz, tras la captura de su asesina, Ana Julia Quezada. «Hemos pedido que para este caso vengan los mejores», resumió el comandante Romero.

La UCO, que resolvió los casos de Diana Quer y del niño Gabriel, se pone al frente de la investigación ante la sospecha de que la joven haya sido asesinada

El mando de la Guardia Civil negó al principio que el instituto armado tenga «a nadie en concreto que digamos este es sospechoso número uno». Romero se refirió así a la información distribuida por varios medios y redes sociales según la cual los investigadores consideran como principal sospechoso de la desaparición de la joven a un hombre que vivía justo enfrente de la casa que alquiló Laura Luelmo en en el número 13 de la calle Córdoba de El Campillo y que en 2001 fue condenado a 15 años de cárcel por asesinar el 15 de octubre de 2000 a cuchilladas a una mujer en la vecina localidad de Cortegana, también en Huelva. Este mismo individuo, en 2008 y durante un permiso penitenciario, intentó atacar con un cuchillo a una vecina de El Campillo en un aparente intento de violación.

Según explicaron mandos de la investigación este individuo, que vivía habitualmente en la casa de sus padres frente a la vivienda que alquiló la joven, se encuentra en paradero desconocido. No obstante, insistieron que no hay indicios, al menos por el momento, para poder relacionarle con la desaparición de Luelmo.

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