«Soy fontanero y así puedes acabar con los malos olores de las tuberías»

En la mayoría de casos esos malos olores tienen origen en la acumulación de residuos orgánicos en las tuberías. Estos pueden ser restos de alimentos, cabello, grasa o residuos de productos de limpieza. Unos restos que se pueden adherir a las paredes internas de las tuberías y, al descomponerse, acabar liberando gases malolientes que afectan principalmente a las cocinas y cuartos de baño.

Sin embargo, pese a que sea difícil controlar lo que sucede en las tuberías del hogar, sí que se puede hacer algo para lidiar con los malos olores. «Los malos olores aparecen cuando los aparatos sanitarios no tienen un sifón individual o colectivo», explica a IDEAL Pepe Torregrosa, miembro de la Junta Directiva de la Asociación de Instaladores de Granada.

Ese sifón «siempre debe tener agua» porque precisamente ese agua presente en el sifón es la que hace de «barrera» y evita que los malos olores de las tuberías suban hacia el interior de la vivienda. «Cuando se secan o se quedan sin agua entra el olor de la tubería a la casa», detalla el experto. De este modo, lo primero que hay que hacer para evitar los malos olores es comprobar que los sanitarios tienen sifón individual o colectivo y que este tiene agua para contar con una barrera contra los malos olores.

Pero si hay olores en el cuarto de baño es posible que no todo dependa del sifón o del bote sifónico. «El inodoro a veces no está bien sellado con el suelo y los olores acaban colándose por ahí. Para solucionar esto basta con realizar un buen sellado con silicona o cemento blanco», explica Torregrosa. Además de todo esto, es importante evitar los dobles sifones, es decir, que el lavabo tenga sifón y luego en ese mismo baño haya un bote sifónico. «Si esto sucede pueden producirse bolsas de aire y dar lugar también a malos olores».

Y en caso de que los olores a tuberías tengan lugar en otros lugares de la casa como terrazas o patios, lo más probable es que todo esté relacionado con los sumideros. «Cuando los sumideros se secan y se quedan sin agua tampoco hay barrera y puede subir el malo olor. Al igual que los sifones, basta con rellenarlos con un poco de agua para evitarlo», finaliza el directivo de la Asociación de Instaladores de Granada.