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Viernes, 12 de enero 2018, 12:32
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El ‘Falcon 900’, uno de los cinco aviones empleados por el Rey para desplazamientos cortos, sufrió una situación compleja en cabina el pasado 5 de mayo cuando iba a tomar tierra en el aeropuerto de Hondarribia. Según destacan ‘El Diario Vasco’, Felipe VI no se encontraba en el interior de la aeronave, ya que se encontraba en Bilbao para acudir a una inauguración. Iba a partir desde el aeropuerto guipuzcoano esa misma tarde. El aviso de alerta fue por una colisión que no se produjo de milagro.
Una avioneta privada se aproximó demasiado a la aeronave de la Casa Real por una imprudencia de su comandante. La aeronave debió llevar a cabo una maniobra que le permitiese evitar cualquier problema.
Tras conocerse el suceso, la Agencia Estatal de Seguridad Aérea abrió un un expediente informativo que se cerró hace solo unas semanas. Éste determinó que ambos aviones quedaron a una distancia lateral inferior a un kilómetro y de unos 30 metros en vertical.
El ‘Falcón 900’ aterrizó en el aeropuerto bilbaíno de Loiu para dejar al monarca y posteriormente se trasladó hasta Hondarribia, de donde partirían por la tarde. El incidente se produjo cuando el avión se trasladaba desde Bilbao para esperar a Felipe VI.
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