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Miércoles, 15 de marzo 2017, 11:49
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La intervención de unos agentes de la comisaría de Parla fue providencial para evitar una desgracia. Una mujer entró en las dependencias policiales en compañía de su bebé de 12 meses dando la alerta de socorro. Eran las 16.30 horas del pasado 4 de marzo cuando aconteció el hecho. El neonato estaba semiinconsciente y rígido. Se había atragantado.
La criatura no respiraba y tampoco respondía a estímulo alguno. Fue por ello cuando los agentes decidieron actuar en lugar de trasladarla hasta el centro sanitario más próximo. Dos funcionarios llevaron a cabo las respectivas tareas de reanimación para desatascar las vías respiratorias.
Según confirma ABC, uno de ellos colocó al bebé a lo largo del antebrazo para iniciar la maniobra de Heimlich mientras el otro llevaba a cabo las presiones torácicas. Así reaccionó el neonato, quien retomó la respiración y comenzaba a responder a estímulos.
Tras el susto contactaron con el centro hospitalario de rigor a donde trasladaron al bebé, una niña, por medio de un dispositivo policial dada la urgencia de la situación. Allí la asistieron y fue dado de alta. Una intervención milagrosa.
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