¿Qué es mejor para los niños: manguitos, flotador, gusano o burbuja?

El conocido churro, es decir, barras de espuma de polietileno flexible de numerosos colores que cada vez se usan más, proporcionan mayor libertad de movimientos y aceleran el aprendizaje. El principal problema es que el niño y no es del todo consciente del todo que si lo suelta se hunde, por lo que es recomendable complementarlos con manguitos. En las clases de natación se han convertido en el material de apoyo que más se utiliza.

En cuanto al tradicional flotador se pueden apreciar dos problemas principales: el primero es que el agujero puede ser demasiado grande causando que el niño se cuele por el y el segundo es que puede volcar.

Finalmente la burbuja tiene el peso distribuido solo por la espalda de manera que no son muy adecuados porque fuerza a los pequeños a nadar doblados dificultando la coordinación.

En definitiva, cada artículo tiene su propia finalidad y va destinado a unas edades determinadas. Asimismo, debemos de tener en cuenta que hay que informarse adecuadamente antes de comprar cualquier producto de este tipo. Para ello se debe de comprobar que las instrucciones vengan en español, que figure el sello de la Comunidad Europea (CE) y que se especifique la edad recomendada y el peso máximo que soportan. El 87% de los juguetes acuáticos, generalmente los procedentes de China, no cumplen la normativa de seguridad de la UE.