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El rostro de la Sierra ha cambiado radicalmente gracias a las últimas nevadas y al frío.
Nieve al final del túnel

Nieve al final del túnel

Sierra Nevada levanta su primera 'pelota de partido' gracias a las últimas nevadas

ALEJANDRO MOLINA

Domingo, 21 de febrero 2016, 02:14

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Sorin Sabin es un cazador. En el buen sentido, claro está. Lleva una cámara de fotos en lugar de un rifle con mirilla telescópica. Este es su primer año trabajando en Sierra Nevada y ha estado a punto de ser el último. En él cobra sentido el dicho de que «tanto trabajas tanto cobras». Su labor consiste en hacer fotos a los clientes de la estación y, con suerte, venderlas. Procedente de Rumanía, reconoce que hasta las nevadas de los últimos días se estaba planteando cambiar de aires. Pero eso ya es el pasado. Ayer, Sorin era uno más de los trabajadores que rezumaban optimismo en Borreguiles. Tras la tormenta llegó la calma. Cuando las nubes se retiraron, Sierra Nevada emergió con la mejor de las imágenes posibles. Es cierto, ha nevado bastante. Se calcula que una media de quince centímetros en Pradollano y en torno a 30 en Borreguiles. Pero se necesita más.

A pesar del optimismo, queda mucho por hacer. Varios remontes que estaban operativos, como el Stadium o Veleta, están fuera de juego por culpa del temible 'manguito', esa capa de hielo que se adhiere al cable de los remontes en los días de temporal y que impide que se puedan usar. Toca ahora hacer un ingente trabajo de desbloqueo para volver a ponerlos en marcha. Para eso (y para muchas otras cosas) Cetursa comenzó ayer a incorporar personal a sus equipos de pistas y remontes. Toca correr, y mucho. Entre el lunes y el martes se incorporaron 46 trabajadores y se irán sumando más en los próximos días. Según fuentes de Cetursa, de los casi quinientos trabajadores que forman la plantilla de la compañía, ya están operativos unos cuatrocientos.

Por lo que se refiere estrictamente a pistas, ayer se superaron por primera vez en la temporada los treinta kilómetros esquiables, con trece nuevas pistas concentradas principalmente en Borreguiles y Cauchiles. Algunas de las nuevas incorporaciones son rojas, como el Águila, que se abre parcialmente, o la variante Morillas. También se habilitaron otras muy populares entre los niños como la Piñata y el Mar.

Prudencia

En Sierra Nevada se respira optimismo aunque son realistas; lo que se ha perdido no se va a recuperar. Antonio Serrano, de los apartamentos Nieve Mar, no quería ayer echar las campanas al vuelo. «Venimos de una situación dramática, con apenas un treinta por ciento de ocupación en nuestros apartamentos durante la semana blanca, esto es sólo un balón de oxígeno», comentaba este empresario malagueño. Según Antonio, lo que se ha perdido ya no se va a recuperar, pero «las nevadas ayudarán a paliar las pérdidas y a ofrecer una imagen de estación buena».

En la misma línea se sitúan algunos de los empresarios de escuelas de esquí. Martín Oltra es gerente de la Escuela Europea y asegura que de no haberse producido estas nevadas, algunas empresas tendrían serios problemas para salir adelante. «Tenemos casos de profesores que viven exclusivamente de la nieve, haciendo doble temporada en Europa y Sudamérica, y que hasta esta semana no habían dado ni una clase», comentaba Oltra, quien a pesar del optimismo, recordaba que la situación sigue siendo difícil económicamente. «Entre los efectos más positivos de las últimas nevadas destaca que ahora tenemos un producto atractivo para los esquiadores de nivel alto», comentó el empresario.

A falta de saber lo que ocurra en la recta final de la semana, en la nuevas nevadas, lo que ya se puede afirmar es que el kilometraje actual se ha consolidado para afrontar en buenas condiciones el último tramo de temporada. Aunque no se han abierto todavía, pistas de la zona de Teleskí Zayas ya se han pisado e incluso han entrado máquinas a valorar la zona de la Laguna.

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