'The Capture'
Crítica de televisión ·
Las herramientas digitales ganan terreno, con poca ética y menos criterio
Un ministro de peso, a quien se le presupone una determinada ideología, es entrevistado en 'prime time' en televisión, a través de 'streaming', conectando desde ... su despacho con el plató en tiempo real. La audiencia, en ascuas, está esperando un determinado mensaje, en una dirección, sobre un tema espinoso de actualidad. El político en cuestión contesta a las preguntas como un robot, impasible e implacable, y suelta algunas frases demoledoras que van totalmente en contra de lo pactado. 'Trending topic' mundial. ¿Qué ha pasado?
La segunda temporada de 'The Capture', serie disponible en Movistar Plus+, reflexiona sobre los avances tecnológicos que nos pasan por encima. La evolución de la civilización no va a la misma velocidad. Las herramientas digitales ganan terreno, con poca ética y menos criterio. Las IA han venido para devorarnos a golpe de 'deepfakes', imágenes generadas por ordenador que imitan la apariencia y el sonido de cualquier persona.
En pleno auge de las 'fake news', noticias inventadas cuyo mensaje se expande, aunque sean desmentidas -dato no mata relato-, es necesaria una propuesta como 'The Capture'. Los bulos corren como la pólvora en las redes sociales, respondiendo a múltiples intereses. Fotomontajes, comentarios fuera de contexto, memes absurdos… Aparentemente, lo más incontestable son los videos. La imagen supuestamente real, en movimiento, es la verdad absoluta, aunque ya puede ser modificada sin escrúpulos. Usted puede ser el protagonista de una película porno sin saberlo ni desearlo, solo hace falta un vecino chiflado con ganas de fastidiarle la vida y altos conocimientos de informática para ser la diana de su venganza porque una vez no le devolvió el saludo en el ascensor. Da miedito.
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