¿Reforma de las pensiones?
Las medidas que planea el Gobierno tienen más de recortes o ajustes necesarios en las pensiones futuras, con el objetivo nada desdeñable de cuadrar la factura
Uno de los temas de mayor actualidad al inicio de 2021, en el ámbito económico, es la modificación anunciada por el Gobierno sobre las pensiones. ... Es intención de este texto delimitar si estamos ante una auténtica reforma del sistema de pensiones o ante un ajuste, adaptación o simple recorte de pensiones.
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Hemos de reconocer que el Gobierno tiene ante sí un problema de gran calado: la caja para el pago de las pensiones no tiene fondos ahorrados sino deuda contraída y los ingresos corrientes son inferiores a los compromisos de pago adquiridos. De futuro, los compromisos van a ser bastante mayores ya que la pensión media está subiendo debido a que están alcanzando la edad de jubilación las personas que más han cotizado tanto en años como en importe, por lo que tienen derecho a mayor pensión, y las cotizaciones van a caer por el aumento del desempleo, y porque los salarios medios, en general, están bajado. Y finalmente se ha comprometido la revalorización de las pensiones existentes con el IPC previsto.
El problema se aumenta por el hecho de que la Unión Europea puede que esté pensando en condicionar el libramiento de los fondos comprometidos por la crisis de la Covid-19 a que España presente una reforma del modelo de pensiones que garantice su sostenibilidad y que no comprometa el déficit del Estado en los próximos años.
¿Qué actuaciones está planeando el Gobierno? Según informan los diarios especializados, lo planteado consiste en:
1. Retrasar la edad efectiva de jubilación endureciendo las condiciones de las jubilaciones anticipadas. ¿Cómo se va a hacer? Pues cambiando las reglas del juego: subiendo los coeficientes reductores y, sobre todo, aplicándolo a la pensión a cobrar y no a la base reguladora. Ello va a afectar a personas que están trabajado, pero sobre todo va a afectar de manera muy dura a personas que fueron despedidas mediante despidos colectivos (ERE) con 55 años o más. Cuando lleven varios años en paro y estén a punto de alcanzar la jubilación anticipada por ERE (61 años) o voluntaria (63) les van a cambiar las reglas del juego a personas que ya no pueden 'jugar'. Se han oído opiniones que recomiendan a dichas personas que vuelvan al mercado de trabajo, en España, hoy y con 63 años. ¿Esto es una reforma del modelo? Creo que estamos ante un claro recorte.
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2. Los mismos medios informan que se ha planteado tomar para el cálculo de la pensión 35 años de cotización, en vez de los 25 aprobados actualmente. De esta forma se incorporarán años de menor cotización (los primeros), por lo que la pensión media bajará. El efecto de esta medida se cuantifica en una disminución del 5,5% de las nuevas pensiones. Si volvemos a la pregunta inicial yo creo que la contestación es sencilla: esto es un claro recorte de la pensión futura cambiando las reglas de cálculo.
3. Y en tercer lugar se anuncia una medida que ya se adoptó con anterioridad, pero ahora se quiere terminar de aplicar y de forma definitiva: que las pensiones no contributivas y las pensiones mínimas a las que les falta cotización no se paguen con cargo a la Seguridad Social sino financiándose a cargo de los Presupuestos del Estado. En mi opinión esta medida lo que hace es normalizar definitivamente algo que muchas voces autorizadas consideraban una irregularidad. El problema no se generó por actuaciones de este Gobierno sino de todos. Así se adoptaron decisiones de reconocida justicia social, que todos los españoles tuvieran derecho a una pensión digna, pero para ello se usó como financiación el dinero de solo los cotizantes a la Seguridad Social. En vez de pagarse por todos los españoles a través de los Presupuestos.
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Entiendo que habrá más cambios, pero los de mayor significación parece que son principalmente estos. Por supuesto se continuará avanzando en el incremento de la edad de jubilación hasta los 67 años, pero eso deviene de la reforma de 2013.
En mi opinión el modelo de pensiones de España, mejor dicho, de previsión social para la jubilación, necesita de una reforma en profundidad, de un cambio de modelo basado en una combinación adecuada del sistema de pensiones públicas y de los modelos de complementos de pensión privados, tanto de empleo como particulares.
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El pilar número 1 del sistema, las pensiones públicas, no pueden seguir la senda de crecimiento que llevan porque no se van a poder pagar con el modelo actual, salvo una decisión política de financiar el déficit de la Seguridad Social anualmente con presupuestos, pero ello implicaría una subida fiscal que parece que nadie está dispuesto a asumir (¿o sí?).
En cuanto al desarrollo del pilar 2, los planes de empleo en empresas, se han anunciado unos cambios sobre los que aún no me atrevo a opinar por no estar públicamente desarrollados, pero sobre los que en principio intuyo una enorme dificultad en su aplicación práctica.
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Y en lo que respecta al pilar 3 del sistema, los planes de pensiones privados, ha sido prácticamente anulado ya este año con la reducción aprobada en los Presupuestos desde 8.000 euros a 2.000 como límite máximo de aportación considerada como gasto deducible, por lo que ha quedado muy vacío de contenido.
Si tengo oportunidad, en otro momento podría avanzar sobre los argumentos en los que me baso para opinar que los pilares 2 y 3, en estos momentos, son de difícil desarrollo en España
Así pues, el Gobierno está planeando la adopción de una serie de medidas necesarias a las que está obligado por una situación de la que él no es el único responsable, lo han sido todos desde el inicio del sistema. Pero esas medidas, de momento y en mi opinión, tienen más de recortes o ajustes necesarios en las pensiones futuras, con el objetivo nada desdeñable de cuadrar la factura anual, que de una reforma del modelo global de previsión para la jubilación.
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