Ojito derecho

Para qué negarlo, somos la envidia de los contornos. Claro, hombre, este territorio ocupa un muy destacado puesto, el 51, de las 52 provincias españolas en inversión por habitante. Sí, los penúltimos, pero no cunda el pánico. Peor lo tienen los que cierran la lista. Ser de los primeros por la cola también tiene su mérito. 'No pasa ná, chache', que decimos por aquí henchidos de arrogancia y mirando de soslayo al más postrero.

Si es que estamos que nos salimos y, para colmo de ventajas, encima ahora mejor todavía como beneficiarios del proceso de descentralización de organismos estatales, pues nadie duda de que lo mollar del asunto tendrá aquí su sitio. Por eso tiemblan nuestros vecinos cordobeses, a los que ya arrebatamos –eso sí, en buena lid- la base logística del Ejército (Plan COLCE). Tiritando se van a quedar también los granadinos al verse privados de la Agencia Española de Supervisión de Inteligencia Artificial, pues esa Agencia viene también para la 'tierra del ronquío', dicho sea con todo respeto y sin merma alguna para cuantos aspiramos la jota, no la aragonesa, sino la letra (j), que aquí -aparte de ser líderes en inversiones e infraestructuras- llevamos a gala la pronunciación gutural fuerte, ese poderoso trino fricativo y uvular que nos distingue del resto de la Humanidad y parte del extranjero.

Así que ya pueden resignarse los colindantes porque esta tierra hace tiempo que es el ojito derecho de los desgobernantes, los de ahora y los de antes. Es lo que hay, y por eso otros territorios y ayuntamientos foráneos andan como alma en pena, ojerosos y cabizbajos al ver que Jaén es candidata al emplazamiento de tales agencias. De sobra saben que aquí vendrán incluso las desaladoras que serán remedio de la sequía. Y tres cuartos de lo mismo con la Agencia Espacial Española, que también tendrá destino jaenero. Así que ya pueden quitárselo de la cabeza los sevillanos, esos pobrecitos ingenuos; que me lo ha contado una pajarita que fue vicepresidenta.

En fin, es de dominio público: Si Jaén está en liza tiemblan las jáquimas de medianeros, a los que –con razón- no llega la ropa al cuerpo conscientes como son de que si algo pingüe sale de Madrid vendrá seguro para acá. Sí, aterrizará aquí, donde ya tenemos puerto de mar y aeropuerto a 100 kilometritos de nada, además de AVE y señero nudo ferroviario.

Así que palmoteemos todos felices y boyantes -como foca en pileta- porque Jaén tiene lo que merece.