Borrar

¡Tráiganme los cataplines de Rubiales!

Si la mitad de lo que ahora cuentan de él fuera verdad tendría que haberse marchado hace tiempo. Pero lo que me intriga son las proporciones del escándalo del beso

Inocencio F. Arias

Lunes, 28 de agosto 2023, 21:54

Comenta

Esta semana la prensa de Estados Unidos y la de España se han ocupado primordialmente de sendos temas con ribetes éticos o legales. En Yanquilandia, ... con todo, su asunto no cubría toda la portada quizás porque se trataba de una fruslería comparada con el nuestro: por primera vez en la historia un presidente estadounidense era fichado como delincuente por la 'futesa' de haber intentando manipular las elecciones en el estado de Georgia para mantener la presidencia. Una chiquillada; lo nuestro, que acaparaba telediarios y portadas, era mucho más gordo, más antidemocrático, más punible: un hombre zafio, en un momento de euforia, había arrancado un beso de los labios de una joven sin, al parecer, su consentimiento.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

ideal ¡Tráiganme los cataplines de Rubiales!