Estados Unidos presiona al BCE

La mano dura contra la inflación anunciada ayer por la Reserva Federal sembró nerviosismo en los mercados y pone en alerta a Europa. Al anunciar ... el mantenimiento de una agresiva subida de los tipos de interés hasta que los precios estén bajo control, el presidente del banco central de Estados Unidos transmitió que no le temblará el pulso en ver satisfecha cuanto antes su gran prioridad aunque desate así una aguda recesión. Jerome Powell asumió que la decisión provocará «algo de dolor» a las familias y empresas, pero defendió que sería peor actuar con paños calientes ante la escalada del IPC por la guerra en Ucrania. El paso de la Fed presiona al BCE, que ha desarrollado una política monetaria mucho más relajada y se plantea un nuevo aumento de tipos de medio punto en septiembre. El Banco Central Europeo puede verse obligado a acelerar sus movimientos en ese sentido no solo por la persistencia de una desbocada inflación, sino por los nocivos efectos de un fuerte desajuste en el precio del dinero entre ambas áreas. Ese factor explica en parte, por ejemplo, la debilidad del euro frente al dólar, que implica un encarecimiento adicional de la ya disparada factura energética.