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Youtube bloquea a Vox

Youtube bloquea a Vox

La red social elimina el canal de la formación de Abascal por «más de tres infracciones» de derechos de autor y no por su contenido

I. ASENJO

Miércoles, 19 de junio 2019, 10:23

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Youtube ha cerrado de su plataforma el canal de la ultraderecha y Vox ha puesto el grito en el cielo. La formación de Santiago Abascal -con un auge en popularidad en las redes sociales bastante considerable en los últimos meses- acusa a la red social de bloquearles sin ninguna explicación y califica el hecho como un «grave atentado la contra la libertad de expresión y difusión de un partido político».

Junto a la denuncia colgada en Twitter por el partido se adjunta un pantallazo del mensaje que encontraron al acceder a su canal en Youtube, que acumulaba cerca de 160.000 suscriptores antes de su cierre. Ahora no existe al ir a buscarlo en la plataforma. ¿El motivo? Pese a que en la red social los simpatizantes de Vox apuntaban a la censura por contenido ideológico, desde la empresa estadounidense alegan que los de Abascal han acumulado «3 infracciones por denuncias de derechos de autor, con previa notificación».

«Cuando un titular de derechos de autor nos informa de que un vídeo infringe esos derechos, eliminamos ese contenido inmediatamente de acuerdo con la ley. Un conflicto de derechos de autor puede resolverse si el usuario envía una contranotificación y prevalece en el proceso», explica YouTube en un comunicado a los medios. Cuando hay tres de esas infracciones, la compañía procede a suspender el canal. La formación de ultraderecha debe hacer ahora una petición que demuestre que son los autores legítimos de los derechos de esos vídeos. YouTube decidirá si es correcto.

YouTube tiene herramientas de administración de derechos de autor para dar a los propietarios de derechos control sobre su contenido en la plataforma. «Cuando el propietario de derechos nos notifica que un video ha infringido derechos de autor, eliminamos el contenido a la mayor brevedad y suspendemos las cuentas de los usuarios que acumulan varias infracciones», explican.

No es el primer cabreo de una formación política con las redes sociales. A finales de abril, Podemos se enfadó con WhatsApp después de que ésta le cerrara a la formación morada la cuenta a través de la que se comunicaba con los simpatizantes que así se lo habían solicitado por realizar «envíos de mensajería masiva».

La decisión causó un hondo malestar en la formación de Pablo Iglesias, que desde que fue víctima de la decisión de la empresa propiedad de Facebook se cuestionó porque no se actuaba de la misma forma contra el resto de opciones políticas.

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