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Rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros EFE
El Gobierno considera que todo el PP no está de acuerdo con la estrategia de «bloqueo» de Casado

El Gobierno considera que todo el PP no está de acuerdo con la estrategia de «bloqueo» de Casado

La Moncloa duda que el líder del PP pueda hacer una oposición «de Estado» y anima a los barones del partido a que reflexionen

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Martes, 18 de febrero 2020, 15:13

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No irá a ninguna parte, pero el Gobierno intentó ahondar las diferencias dentro del PP sobre el tono que debe tener su estrategia de oposición. La línea de Pablo Casado de no hacer la menor concesión, ni siquiera en asuntos de Estado, no es, a juicio de la Moncloa, compartida por todos los dirigentes populares, a los que la ministra portavoz animó a tomar cartas en el asunto para que el principal partido de la oposición vuelva a «ser oposición de Estado» y abandone las posiciones de «bloqueo».

María Jesús Montero pretendió azuzar la disidencia dentro del PP con el argumento de que «este país necesita una oposición centrada, constructiva y leal a los intereses de España». Unos principios que, subrayó, no guían la labor opositora de Casado, empecinado en «la política de obstrucción» que antepone «los intereses partidistas sobre los generales». España, prosiguió la portavoz gubernamental tras la reunión semanal del Consejo de Ministros, «necesita que el PP regrese a la senda de la responsabilidad, que lo haga el señor Casado y si Casado no está en condiciones, que lo haga el PP en su conjunto».

Montero fue más allá, y tras mostrarse «convencida» de que en el principal partido de la oposición no todos comparten la estrategia de Casado, singularizó en el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, la disconformidad. El líder de los populares gallegos no es el único, también los del PP andaluz, Juan Manuel Moreno, y del PP vasco, Alfonso Alonso, han abogado por posiciones más centradas, pero por su condición de barón de barones al ser el único que gobierna con mayoría absoluta, fue individualizado por el Gobierno como referente de una oposición constructiva, y no de tierra quemada.

La firmeza en la negativa de Casado a negociar la renovación de los cargos institucionales no sorprendió a Pedro Sánchez, pero fue un borrón en la imagen del diálogo que el presidente del Gobierno quiere imprimir a su gestión. Diálogo en Cataluña, diálogo con la oposición, diálogo con los agentes sociales. El de la oposición es, quizás, el más necesario para Sánchez porque de él depende el buen funcionamiento del sistema. Por eso la ministra portavoz apeló al PP, como «partido serio, partido de gobierno», para restablecer unos puentes imprescindibles para una legislatura ordenada.

La fórmula del Consejo

El argumento de Casado de cambiar la fórmula de designación de los vocales del Consejo General del Poder Judicial es para el Gobierno el mejor ejemplo de tomar a las instituciones constitucionales como «rehenes» de su estrategia opositora. El PP propone que 12 de los 20 vocales el órgano de gobierno de la judicatura sean elegidos por los jueces sin intervención parlamentaria. Un sistema que no defendió mientras gobernó. Solo al estar en minoría parlamentaria ha hecho de esa fórmula una de las banderas de su oposición.

«El PP debe volver a la responsabilidad, y si Casado no está en condiciones, que lo haga el PP en su conjunto»

El problema para el Gobierno es que sin la colaboración del PP se arriesga a una legislatura con mayoría conservadora en el Consejo General del Poder Judicial. La designación de los vocales, diez por el Congreso y diez por el Senado, exigen mayorías de dos tercios en ambas Cámaras, y sin los populares es imposible.

En la Moncloa, sin embargo, no tiran la toalla, y además de la apelación a los descontentos con Casado dentro del PP, confían en que el jefe de la oposición cambie de criterio una vez que el Gobierno logre sacar adelante los Presupuestos, si es que lo consigue. Con el proyecto de las cuentas públicas aprobado, estarían casi garantizados al menos dos años de mandato, y ante esa tesitura Casado podría replantearse su estrategia opositora sin concesiones para situarse en posiciones más conciliadoras.

Vox asegura que PSOE y PP «están más cerca de lo que les gusta escenificar y pactarán todo aquello que les interese»

Pero no deja de ser una elucubración porque Casado está resuelto a no dejar ningún espacio en la oposición a Vox, es su obsesión, dicen en su partido, y cree que abriría la puerta si se aviene a llegar a algún tipo de acuerdo con los socialistas. este martes mismo sin ir más lejos, el portavoz ultraderechista en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, tachó de «teatro» de Sánchez y Casado el desacuerdo exhibido tras su cita del lunes en la Moncloa. «Están más cerca de lo que les gusta escenificar», apuntó, y vaticinó que dentro de poco «llegarán a acuerdos para todo aquello que les interese».

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