Así fue el Lamborghini Arena, la fiesta bienal para celebrar la marca

Sus modelos están prácticamente vendidos para el ejercicio 2025 –un año más si hablamos de su Revuelto, cuyo diseño y prestaciones han seducido a cualquiera que pueda gastarse medio millón de euros en uno–, la fábrica de Sant'Agata Bolognese está a plena capacidad y no paran de llegar nuevos socios ansiosos de poner su nombre junto al legendario toro que, por cierto, ha renovado su imagen.

Año frenético, pues. Tanto así que para celebrar todos estos hitos decidieron posponer la fiesta que tenían planeada de finales de 2023 a principios de 2024.

El evento, llamado Lamborghini Arena, es el primer festival que celebra la marca para sacar pecho de su legado histórico –algo que, decididamente, no es difícil, porque sus modelos son universalmente adorados–.

Los aficionados al emblema de la Emilia Romaña podían elegir su grado de participación, desde visitar las exposiciones de los asociados, desde los sistemas de escape Akrapovic, hasta la marca de zapatos Tod's –presentaban uno de sus mocasines con la edición limitada de Lamborghini–, pasando pro la de afeitado Gillette, o la de tenis y pádel Babolat, que comenzará a fabricar una pala en Sant'Agata.

No solo se trataba de expositores, sino que se habían habilitado zonas interactivas: había una pista de pádel en la que se podía retar a atletas de Babolat, configuradores de realidad virtual para coches exclusivísimos con el departamento Ad Personam, y una zona de videojuegos con simuladores de carreras –por supuesto, Lamborghinis en el circuito de Imola–.

Y, por supuesto, muchos coches. Desde la marca contaron hasta 380 Lamborghinis, 352 de los cuales entraron a dar dos vueltas conmemorativas por Imola para inmortalizar la primera edición, contando con modelos icónicos de la marca, como el Countach, Diablo, Miura, 250 GT, Jalpa o Jarama.

Incluso se pudieron ver los ultra-exclusivos Essenza SCV12, las máquinas de competición más salvajes de las que dispone la marca, destinadas solo para circuito y para clientes que puedan desembolsar 2,5 millones de euros.

Había cuatro de ellas, un 10% de todas las unidades producidas de estos modelos con el V12 deslimitado capaz de entregar 830 caballos.

Por la noche de la primera jornada, la marca celebró una fiesta para sus clientes, que contó con la actuación del grupo italiano Planet Funk. Allí, desvelaron una edición especial del Revuelto, con un color gris único.

Stephan Winkelmann, el consejero delegado de Lamborghini, hizo un repaso a sus 12 años de dirección, y sentenció: «Estamos realmente orgullosos de haber organizado este evento único, que tiene lugar en un momento muy especial para nuestra marca, tras las celebraciones del 60 aniversario del año pasado y en 2024, coincidiendo con la hibridación de la gama».