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Miércoles, 13 de diciembre 2017, 20:08
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El Clase G es una leyenda en el mundo del todoterreno y desde 1979 se han producido más de 300.000 unidades. En 2018 aparecerá el nuevo modelo, en el que la marca anuncia que cambia poco por fuera, pero se actualiza por completo el interior con numerosos nuevos elementos. Se trata de la mayor transformación en sus casi 40 años de historia, tanto desde el punto de vista técnico como de diseño.
Es el modelo de serie con la producción más longeva en la historia del fabricante. La historia comenzó en 1972 con el acuerdo de colaboración entre Daimler-Benz y Steyr-Daimler-Puch en la ciudad austriaca de Graz. Como entonces, la fabricación actual del Clase G es en gran parte manual. Cuando fue lanzado en 1979 estaba disponible con cuatro motorizaciones desde 72 hasta 156 caballos, en carrocería cabrio o el familiar de batalla corta o larga.
El 25 aniversario del modelo estuvo marcado por la aparición de una versión, el G 55 AMG Kompressor, una "bestia" con motor de ocho cilindros, 476 CV de potencia y 700 Nm de par. Cinco años después, en 2009 incluía una serie de nuevos equipamientos que mejoraban el confort. Las ventas fueron aumentando desde entonces y en 2016 el Clase G registró un nuevo récord de ventas con casi 20.000 unidades entregadas en ese año.
El verano pasado salió de la línea de producción de la planta de Graz el Clase G número 300.000. Un Mercedes G 500 en pintura designo azul Mauritius metalizada con asientos de cuero negro y costuras de contraste en blanco. Esta unidad iba equipada con neumáticos all-terrain montados sobre llantas de aleación negras de 16”.
El nuevo interior de la próxima generación destaca por lo redondo de las salidas de ventilación o el diseño de los intermitentes delanteros que dan forma a los altavoces. El cuadro de instrumentos cambia por completo e incluye de serie esferas analógicas. Pero al igual que en las Clases E y S, se ofrece en opción una instrumentación digital llamada “wide-screen”, formada por dos pantallas de 12,3 pulgadas unidas por un cristal único. El conductor puede elegir entre tres estilos diferentes para la representación de los instrumentos: Classic, Sport y Progressive.
El sistema de infoentretenimiento del nuevo Clase G se puede accionar sin retirar las manos del volante. Cuenta con mandos táctiles en el volante y el conductor puede hacer uso del touchpad sin retirar la vista de la carretera. Los sistemas de asistencia a la conducción, opcionales, también se activan y desactivan de forma directa desde el mando situado sobre el interruptor circular que controla las luces.
Las nuevas dimensiones interiores del Clase G son mayores, tanto en anchura a la altura de los hombros como en espacio para las piernas. La nota más destacada es que el espacio para las piernas en las plazas traseras crece en 15 centímetros frente a la generación anterior. Los asientos disponen de la función memoria para el del conductor, asientos delanteros y traseros calefactados y en opción pueden equipar masaje, climatización y ajuste lumbar eléctrico en los asientos delanteros.
Se mantienen las señas de identidad del Clase G como la agarradera del salpicadero frente al copiloto, el distintivo tirador de la puerta o los interruptores cromados de los bloqueos de diferencial y la rueda de repuesto anclada en el exterior del portón trasero.
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