Cuatro partidos más para la gesta de jugar el tercer 'play off' consecutivo

Para las personas que creen en el destino como una fuerza superior que tiene un plan trazado y que es inevitable, lo que ocurrió en la jornada del fin de semana es un mensaje, este Linares va a volver a pelear por ascender. Un 'play off' que, por fin, recupera el formato de partido a doble vuelta donde el factor Linarejos puede ser la clave del éxito.

Los 10 minutos entre el 84 cuando marcó Fermín, el 88 cuando empató Borja García y el 94 con el 2-1 de Lolo González, todavía no se han borrado de la retina de los azulillos que lo vivieron en el campo. El pinchazo del Celta B allanó el camino para recuperar la quinta plaza de la liga y la derrota del Mérida mete más distancia a los rivales por los puestos de Copa del Rey.

La imagen de Lolo con los brazos abiertos celebrando el gol del triunfo se convirtió en meme en las redes sociales el lunes. Su picardía en el desmarque, control y ejecución, fueron perfectas y la grada le devolvió el cariño, a un hombre carismático que en las últimas jornadas había protagonizado algunas acciones poco afortunadas en defensa. Todo quedó perdonado con el 2-1.

«Tuve la suerte de ser yo, daba igual quién marcase el gol, lo importante era sumar los 3 puntos. El partido vimos que se nos puso a favor con la expulsión del Badajoz en el minuto 6, desde entonces intentamos meter cuanto antes el gol. Ellos jugaron su partido, perdieron tiempo, y al final merecimos la victoria», manifestó el central azulillo.

Alberto González no puede negar que la nueva semana arranca con «sensación de euforia total, disfrutando de una victoria que, cuando más la sufres, más grande es el subidón. Vamos a disfrutar el momento y la situación en la que estamos».

Centrado en el análisis del partido ante el Badajoz, empezando por la expulsión a los 6 minutos, reconoció que «no esperaba la roja, pudo ser excesivo. Su planteamiento del partido no cambió, incluso pudo reforzarlo, y a nosotros nos metió una presión extra. Lo único que cambio es que pasaron de 5 atrás a línea de 4».

El Linares no consiguió traducir esa superioridad en el área en ocasiones de gol, mientras que el Badajoz «seguía teniendo tres jugadores arriba buenísimos que de cualquier despeje son capaces de generar 3 o 4 ocasiones clarísimas. Santamaría, Adilson y Soto, no sé lo que puede costar tenerlos. Tiramos la primera parte, teníamos que haber llegado 25 veces al área y en el descanso lo explicamos mejor, por eso en la segunda parte llegamos mejor y se les notó el desgaste».

Y si el Linares no llega a ganar con un hombre más «la afición se hubiese desconcertado, pero es que no es fácil, hemos visto al Fuenlabrada ganarle con diez al San Fernando. Tu afición se pone nerviosa, el rival está bien colocado, con grandes jugadores, tienes mucho que perder y poco que ganar. Siempre hablamos de no tener presión respecto a los rivales de arriba, pero esta vez sí la sentimos. Teníamos un equipazo en frente, que no están en buena dinámica pero, a poco que se ajusten, le ganan a cualquiera».

Si el gol de Lolo González vino genial en lo anímico para la conexión entre el central y la grada, hay un futbolista que contra el Badajoz se vio a un nivel superior respecto a semanas anteriores. Abeledo fue incisivo, resolutivo, profundo cuando había que serlo y se atrevió en conducciones largas que, esta vez, sí salían.

«Era su momento el otro día y no le salían las cosas, por eso tuve que cambiarlo, pero hace tiempo que le vienen saliendo en los entrenamientos. En la competición no hemos podido ver su mejor versión. Estaba el runrún de la grada, las cosas no le salían y ojalá este sea ese día. Está preparado y creo que tenemos al jugador que realmente es Abeledo, con muchos recursos, ojalá pueda seguir aportándolo», dijo Alberto González del atacante.

Se abre una semana de entrenamientos donde el cuerpo técnico intentará recuperar algunos efectivos para tener un banquillo más completo y con más soluciones ofensivas que ante los pacenses.