La Junta subraya el valor de los recursos naturales y culturales de Aldeaquemada como reclamo turístico

"El municipio se encuentra en un lugar privilegiado en Sierra Morena y atesora incalculables valores ligados a la naturaleza, al arte rupestre y a la historia dentro de la colonización que llevó a cabo Carlos III en Andalucía", ha destacado durante la visita al Centro de Interpretación Pablo Olavide.

Tras abordar asuntos de interés para los vecinos de Aldeaquemada en materia de turismo, deporte y cultura, y mostrar el compromiso de la Junta de Andalucía para seguir colaborando con el Ayuntamiento, la delegada ha puesto de relieve parajes como el de La Cimbarra, que son un atractivo para el turismo de naturaleza, así como la gran cantidad de abrigos y cuevas, entre ellas la de los Mosquitos y de la Mina, que conforman un rico patrimonio prehistórico y rupestre con rocas que datan del periodo Paleozóico.

"A todo ello, Aldeaquemada añade una rica gastronomía y es un importante referente cinegético de Sierra Morena sumando así más atractivos a su oferta turística y de ocio en un entorno privilegiado", ha añadido.

Pilar Salazar ha vuelto a incidir en el respaldo del Gobierno andaluz a la celebración de los actos programados por el cumplimiento del 250 aniversario de la Fundación de las Nuevas Poblaciones, que supuso el primer proyecto de europeidad en el siglo XVIII y del que Aldeaquemada forma parte junto a La Carolina, Carboneros, Guarromán, Santa Elena, Montizón, Navas de Tolosa y Arquillos.

Así ha indicado que esta efeméride enlaza con la iniciativa 'Tus Raíces en Andalucía', puesta en marcha por la Consejería de Turismo y Deporte, que promueve la creación y promoción de productos relacionados con el 'turismo de raíces, genealógico o ancestral'. El proyecto, dirigido a los mercados nacional e internacional, se basa en atraer viajeros de regiones o países que mantienen con la comunidad lazos culturales, históricos y familiares, como Alemania en este caso.

Este aniversario recuerda el proceso de creación de nuevos asentamientos de población que emprendió el rey Carlos III en Andalucía a partir de 1767, a través de colonos alemanes y flamencos, fundamentalmente. En este proceso se fundaron un total de 60 pueblos y aldeas, de los que quedan 48 en la actualidad y que conservan hoy en día huellas culturales de aquel origen singular.