El Centenillo reclama derechos históricos, mientras su futuro como ELA está en el aire
Viernes, 17 de julio 2020, 23:24
Para ir de El Centenillo hasta Baños de la Encina hay que pasar primero por La Carolina, que es la localidad más cercana. Después por ... Carboneros, Guarromán y, de ahí se llega al destino. 42 kilómetros que se recorren en aproximadamente 40 minutos, dicen los mapas de Google. Una distancia considerable que ayuda más bien poco en una 'guerra' entre los representantes públicos de ambos territorios, que se abrió hace ya meses y que cada vez está más enconada.
La figura reconocida de Entidad Local Autónoma (ELA), que tiene desde hace décadas el Centenillo, y que ahora está en juego, es el motivo de esa disputa, tras la cual hay, sobre todo, razones económicas, aunque también políticas e incluso de identidad e historia. El pasado jueves, el pleno de Baños de la Encina aprobó el expediente inicial para la supresión de la entidad local. Lo hizo con los votos a favor de PSOE e IU (ocho en total) y con los tres votos en contra del PP. Hay que recordar que la actual alcaldesa de El Centenillo es del PP.
Más allá de la polémica que se produjo a las puertas del Ayuntamiento de Baños ese día, ya que los vecinos de El Centenillo que quisieron asistir al pleno, no pudieron hacerlo, y se quedaron en la puerta a modo de protesta, el alcalde de Baños, Antonio las Heras (PSOE), aseguró que la intención de su equipo de Gobierno no es suprimir la ELA, «aunque tiene muchas condiciones para ser suprimida».
«Sabemos que no somos infalibles y queremos hacer las cosas bien», dijo Las Heras, quien explicó que el principal objetivo del inicio de este expediente es hacer un informe de viabilidad económica de la ELA, y que para hacerlo, el margen que permite la Ley es a través de un procedimiento para la creación de una entidad o en un procedimiento para la suspensión. «Como ya está creada, pero nunca se ha estudiado su viabilidad, tenemos que abrir un expediente de suspensión para poder analizar todos los datos».
Una vez que estén todos esos datos sobre la mesa, aseguró, se tomará la decisión pertinente, y según el alcalde, en esa decisión tendrán que participar representantes de la Junta de Andalucía, la Diputación, la junta vecinal de El Centenillo y del Ayuntamiento matriz. «Es la única solución, este tema no se puede seguir dejando sobre la mesa, llevamos siete u ocho meses hablando de lo mismo y no llegamos a ninguna conclusión».
Y ¿por qué ahora toda esta polémica después de tantos años? Según Las Heras, porque el actual equipo de Gobierno en la ELA, encabezado por Rocío Ventura, ha reclamado más dinero para la misma, «entre otras cosas para crear allí un ayuntamiento». Algo que desde Baños de la Encina ven completamente inviable.
Además, según el alcalde de Baños, no habrá ningún cambio para El Centenillo sea una ELA o no. «Los servicios básicos seguirán prestándose».
«Migajas»
Absolutamente diferente es la postura de la alcaldesa de El Centenillo y de las Federaciones Española y Andaluza de Entidades Locales Menores, que ya se han pronunciado al respecto.
Desde estas últimas recuerdan que la mayoría de las ELAs reciben las «migajas» del Ayuntamiento matriz, a pesar que en Andalucía la LAULA regula sus derechos. «Igual que la población de un municipio tiene derecho a recibir parte de la PIE y de la Patrica, que le corresponde por número de habitantes, las ELA también». Pero, «esto no se respeta, y en el caso de El Centenillo, no ha habido nunca un convenio regulador. Lo que ahora se demanda es una puesta al día de todo el dinero que se les adeuda. Es algo lógico para una alcaldesa que quiere saber con que presupuesto cuenta para saber qué puede hacer y qué no».
«Suprimir la ELA supone también acabar con el bagaje histórico de este territorio, y contribuye también a la despoblación porque no es lo mismo ser una localidad que una barriada», explican desde las federaciones, que recuerdan que, entre otras cosas, las ELA pueden pedir subvenciones, las barriadas no.
El Centenillo es un territorio marcado por su pasado minero. Los ingleses que ya llevaban tiempo trabajando en las minas de La Carolina descubrieron a finales del siglo XIX las prospecciones de El Centenillo, que habían sido explotadas en época romana. Al calor de las minas nació el poblado, con bastante parecido a un pueblo minero de la campiña inglesa.
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