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Castillo de Canena rinde homenaje a la ruta de las especias infusionando sus aoves con especias de todo el mundo

Castillo de Canena rinde homenaje a la ruta de las especias infusionando sus aoves con especias de todo el mundo

Con esta edición de Arbequina&World se ha pretendido rememorar «aquellos lejanos momentos en los que España se adelantó al mundo de las fusiones gastronómicas y al mestizaje de sabores»

EUROPA PRESS

JAÉN

Sábado, 14 de julio 2018, 12:18

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Castillo de Canena ha querido rendir homenaje a la ruta de las especias con una colección de aceite de oliva virgen extra arbequino infusionado con las mejores especias de América, Asia, Europa y África.

Según se ha informado desde Castillo de Canena, empresa familiar jiennense cuyos aceites están ya presentes en 50 países de los cinco continentes, el objetivo de esta iniciativa ha sido obtener unos aceites exclusivos inspirados en los antiguos mercaderes de especies, en las travesías del galeón Manila, en la ruta de la seda, sus mapas, viajes y descubrimientos.

La directora Comercial y de Marketing de Castillo de Canena, Rosa Vañó, ha indicado a Europa Press que con esta edición de Arbequina&World se ha pretendido rememorar «aquellos lejanos momentos en los que España se adelantó al mundo de las fusiones gastronómicas y al mestizaje de sabores».

«Hemos querido rememorar este hecho e interpretarlo en la actualidad en un novedoso ejercicio de geografía gastronómica», ha señalado Vañó. El maestro picolier Marcos Reguera ha sido el encargado de seleccionar las mejores y más características especias de cada continente para infusionarlas con el aceite de oliva.

Por lo pronto, la empresa cuenta con una producción inicial de 5.000 packs de esta nueva gama y, además de España, los exportarán a los países escandinavos, Alemania, Francia, Reino Unido, Estados Unidos y Japón.

La colección surge de un cuidado proceso que mantiene toda la esencia y calidad tanto de los aceites como de las especias seleccionadas y que se importan en bruto para mantener sus aromas y sabores. Cuando llegan a la almazara se muelen en un molino especial y después su polvo se introduce en pequeños sacos de celulosa que se sumergen en el aceite durante varios días.

Canela, cardamomo, pimienta de Szechuan, las bayas rosas o el comino son algunas de las quince especias elegidas para perfumar los aceites de oliva vírgenes extra y que llevan, según Vañó, a un «viaje sensorial alrededor del mundo, una experiencia culinaria única y sorprendente».

Todo cuidado al detalle, el sistema de dosificación que incorpora cada botella posibilita el uso adecuado de estos nuevos aceites ya que permite medir con exactitud las cantidades necesarias para cada receta y maridaje.

La compañía, que toma el nombre del castillo familiar que se alza en la loma del municipio de Canena (Jaén), pertenece a la asociación Grandes Pagos del Olivar, que agrupa a los mejores productores españoles de aceite de oliva virgen extra, que optan por producciones muy limitadas de un aceite de altísima calidad elaborado bajo métodos que mezclan el carácter artesanal con la aplicación de las tecnologías más avanzadas.

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