El aceite de oliva italiano se vende aún al doble que el español pese al repunte de su precio

El aceite de oliva virgen extra (AOVE) de nuestra tierra es el que más barato se vende del mundo junto al griego, con Túnez pasando los tres euros ampliamente e Italia superando los cinco ya. El aceite de oliva virgen extra italiano vuelve a ampliar distancias con respecto al español tras haberse reducido en los últimos tiempos y se vende al doble actualmente.

Según el último boletín publicado por el Consejo Oleícola Internacional (COI), correspondiente a octubre, «los precios italianos repuntan en los últimos meses rompiendo la barrera de los cinco euros a principios de septiembre, durante las últimas semanas se mantienen estables situándose a mediados de octubre se sitúan en 5,08 euros/kg que representa una disminución del 5% comparado con el mismo periodo anterior». Mientas, los precios en origen en España han perdido un 30% de su valor, según resalta también el COI. En el sistema Poolred, pese al ligero aumento de las últimas semanas, cotiza el virgen extra a 2,8 euros. A 2,43 el virgen y 2,3 el lampante.

El aceite virgen extra italiano sigue siendo el que se vende más caro en el mercado internacional. Según los datos del sistema Ismea a los que ha tenido acceso ASAJA-Jaén, el extra virgen italiano cotizó aún más caro a finales de octubre, «a 5,17 euros por kilo de aceite de esta categoría. El segundo que cotiza más alto dentro de los cuatro principales países productores es el griego, con 2,87 euros por kilo en origen. Después, el español».

Según datos de Ismea, del 22 al 28 de octubre se vendió a 2,79 euros por kilo en origen en el mercado internacional, mientras que el tunecino cotizó a 2,58 euros. El aceite lampante español, sin embargo, fue «el que se vendió más caro en el mercado internacional si se compara con los lampantes de los principales países productores. Así, nuestro lampante cotizó a 2,30 euros por kilo; mientras que el lampante italiano se vendió a 2,06; el griego a 2,07 y el tunecino a 2,13 euros por kilo en origen».

Otro de los problemas clásicos asociados al bajo precio en la provincia es el del valor añadido del producto ya envasado. La provincia cerró la campaña pasada con un 7% del total de su cosecha de aceite de oliva envasada, la mayor parte del producto salió de ella a través de camiones cisterna para que el valor añadido se lo lleven otros, de otras provincias o países como Italia. Las últimas cifras de envasado apuntan a un leve incremento del porcentaje (en términos relativos que no absolutos), pero muy lejos del 25% al que aspira el sector en la provincia.

Jaén se encontrará en los próximos meses, eso sí, con una campaña histórica si el tiempo sigue acompañando en las próximas semanas y se cumplen los pronósticos. El aforo de cosecha de la Junta, que sirve como referencia para marcar los movimientos del mercado cada año, confirmó que hay mucha aceituna en los árboles y habrá mucho aceite.

Según este aforo Jaén alcanzará las 685.000 toneladas de aceite, un 75% más que la campaña anterior. El reto será colocarlo en el mercado a un precio justo para el agricultor. Ayudará, eso sí, que el mundo tendrá en total un 7,6% menos, según el COI, por la caída de producción en terceros países (en Italia 270.000 toneladas, un 37% menos, Grecia 240.000, un 30,6% menos o Portugal 130.000 un 3,6% menos), dejando a Jaén en una situación de privilegio si se cumplen los pronósticos para poder vender su producción y marcar precios.