El PAOK de Salónica, un candidato irregular al trono heleno

El Krasnodar fue el encargado de apear al PAOK de la máxima competencia europea, pero ya entonces el conjunto griego había dejado en la cuneta a dos 'cocos' de la fase previa de la Champions. El primero fue el Besiktas turco, que cayó por 3-1 en el Toumba Stadium -Estadio La Tumba en su traducción al castellano, situado en el distrito del mismo nombre-. El siguiente fue el Benfica, que también sucumbió en feudo heleno, donde ya casi se veían en el mejor torneo del continente por primera vez en su historia.

Es el paso que le falta por dar a un equipo en pleno crecimiento, que en la última década se está convirtiendo en un habitual de la fase previa de la Champions. Sí es asiduo a competir en la Europa League desde antes, incluso, de que fuese así denominada. Ha participado en siete de las últimas diez ediciones del campeonato continental. En la última, en la temporada 2018/2019, fue eliminado en la fase de grupos tras ganar sólo un partido, pero dos años antes se plantó en los dieciseisavos de final, donde el Schalke 04 le eliminó al ganar en Grecia y empatar en alemania.

Dirigido por el exfutbolista portugués Abel Ferreira, el PAOK de Salónica fue segundo el curso pasado en Liga, a siete puntos del Olympiacos, y semifinalista de la Copa Griega, eliminado también por el conjunto rojiblanco. Llegó a ser líder durante siete jornadas, amparado principalmente en su rendimiento en el Toumba Stadium, aunque no pudo seguir el ritmo del campeón.

Precisamente, la segunda posición es la clasificación más repetida por el conjunto griego en la última década. Al título de 2019 se unen un total de cinco subcampeonatos, dos terceros puestos y otro par de cuartas plazas. Son los lugares que suele ocupar en el campeonato doméstico, si bien en la 2007/2008 resbaló y quedó noveno.

Cuenta con una plantilla de poco más de 25 años de edad de media, con algunos jugadores de cierto prestigio en el panorama europeo. Es el caso del mediocentro Omar El Kaddouri, que, entre otros equipos, militó en el Nápoles y en el Torino. Ahora es un fijo en la medular del PAOK, junto con el austriaco Stefan Schwab, recién fichado tras brillar con el Rapid de Viena. En la zaga ha incorporado a Moussa Wagué, cedido por el Barça, quien, a priori, terminará siendo titular. Probablemente forme frente a Zivko Zivkovic, indiscutible bajo palos, con el exgranadinista Sverrir Ingi Ingason, pieza importante la campaña pasada y en seis duelos de lo que va de curso. Fernando Varela y el griego Michailidis completan habitualmente la zaga. Pugna por hacerse un hueco en esta línea el español José Ángel Crespo, que pasó por Rayo Vallecano, Córdoba y Bolonia, entre otros clubes.

Los flancos son propiedad de Giannoulis y Andrija Zivkovic, recién llegado este último del Benfica para convertirse en una de las principales armas del PAOK. Suma ya dos goles y una asistencia en seis partidos, cifras que mejoran el rendimiento de Swiderski, el goleador del cuadro heleno el curso pasado. El polaco marcó once tantos en Liga, otros dos en Liga y uno más en la fase previa de la Europa League, datos que resultaron esenciales para la clasificación final del cuadro heleno. A ellos se une el joven Tzolis, de 18 años, que emerge este curso de la cantera tras debutar en el último ejercicio con el primer equipo. Ha jugado siete encuentros, seis como titular, y ha marcado tres goles, cifras aderezadas con una asistencia. Una carta de presentación que espera pulir en su debut en Europa League.