Son jugadoras de Primera

La temporada del Granada femenino no ha sido fácil, ya no solo en lo deportivo, estando gran parte del campeonato en puestos de descenso, sino también en lo institucional. Se han visto obligadas a disputar sus partidos a caballo entre la Ciudad Deportiva (una instalación a día de hoy no apta para una competición de este nivel, que todo hay que decirlo) y Los Cármenes, más en función del rival que por sus propios méritos, algo que no debe de ser fácil de digerir. Aun así, demostraron orgullo y profesionalidad, levantando el vuelo cuando pocos lo esperaban para disputar la permanencia hasta el final. Duele decirlo, pero creo que el club no ha estado a la altura de sus jugadoras, sobre todo cuando las envió a Motril a jugarse la permanencia por no tener una instalación en la Ciudad Deportiva acorde a la categoría y por preferir organizar un concierto en el coliseo del Zaidín.

Que el éxito de la selección española no nos haga olvidar la hazaña del Granada femenino ni impida a la afición hacer la siguiente reivindicación. Las Lauri, Edna, Laura Pérez, Naima o Sandra probaron su valía y esperemos que, ya que en la próxima temporada 2024/25 serán las únicas que jueguen en la máxima categoría, el club las valore y las trate como merecen: como jugadoras de Primera división.