El partido de todos

Les contaré algo. Hace unos meses fui incluido en un grupo de WhatsApp de aficionados al Granada y disfruto mucho con sus ocurrencias e historias. Gente muy sana y competente. Hace poco contaron cómo se enamoraron de este escudo durante sus vidas. Muchos, lógicamente, provenían de su afición a los grandes transatlánticos del fútbol español, pero la historia de uno de ellos, Javier, me dejó helado. Le detectaron un linfoma hace años a pesar de su juventud y su distracción cada fin de semana era ver el partido del Granada o acudir al estadio a verlo. Su amor al granadinismo le ayudó a superar su dolencia.

Comprendí en ese momento el sentimiento tan grande que desborda este club. Lo importante que es para mucha gente. Hace unos días cumplió 90 años de historia. ¿Se imaginan su vida sin la existencia del Granada? Yo tampoco. Por todo ello, disfrutemos del momento actual y valoremos lo que tenemos. Ojalá esta temporada sea el punto de inflexión para convertirnos en un grande de España. Más de lo que ya es para todos nosotros.

Y esta noche, prepárense. Tendrá lugar el cierre de una eliminatoria que muchos jugaron en los videojuegos. Y sueñen con la remontada. Ojalá sea un encuentro que recordemos durante toda nuestra vida. Ese que contaremos a nuestros hijos y nietos y les hará abrir los ojos como nos ocurría a nosotros con el Granada de los 70. Un escenario imponente. Un partido maravilloso. El de Javier y el de todos nosotros.