Los contratos de los jugadores que sufran ERTE serán ampliados
De acuerdo al nuevo decreto, sus vínculos se reanudarán una vez finalice la medida por el mismo tiempo que estuvieron paralizados
El Granada no ha manifestado todavía si plantea acogerse a un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) para mitigar las pérdidas que la ... paralización del fútbol profesional en España a causa del COVID-19 está causando en la entidad. Una medida a la que sí se han visto forzados por ahora FC Barcelona, Atlético de Madrid, Alavés y Espanyol, a los que podrían seguir otros clubes de Primera y Segunda que ya lo estudian. Este lunes, no obstante, los clubes de LaLiga se reunirán con Javier Tebas para analizar esta cuestión junto a las posibles reducciones de sueldo de los futbolistas. Un encuentro que podría precipitar las acciones en la entidad rojiblanca.
Entre otras cuestiones, está por ver qué ocurre con los contratos de aquellos futbolistas que expiran el próximo 30 de junio. LaLiga contempla que la competición se complete en verano, es decir, en los meses de julio y agosto, algo que obligaría a tomar alguna medida respecto a aquellas relaciones contractuales que quedarían extintas. En principio, todos los jugadores afectados verían prolongada su continuidad. En el Granada, esto afectaría en concreto a Álvaro Vadillo y Aarón Escandell, que renovarán a falta de oficialidad; Soldado e Ismail Köybasi, que firmaron libres por una temporada; y los cedidos Gonalons, Yangel Herrera, José Antonio Martínez, Carlos Fernández, Jesús Vallejo, Foulquier y Gil Dias, con opciones de compra en el caso de los dos galos.
Lo que ocurra con los contratos de los futbolistas profesionales que expiran el 30 de junio seguirá siendo una incógnita hasta que LaLiga decida de qué manera va a reanudar la competición. Por ahora lo único seguro es lo que concreta el Real Decreto-ley 9/2020 en vigor desde el pasado viernes 27 de marzo para regular aquellas medidas complementarias en el ámbito laboral en pos de paliar los devastadores efectos derivados del COVID-19 para el mundo de la empresa, algo que incluye sin excepción a los clubes de fútbol profesionales.
De acuerdo a lo estipulado en el artículo 5, «la suspensión de los contratos temporales (…) supondrá la interrupción del cómputo, tanto de la duración de estos contratos como de los periodos de referencia equivalentes al periodo suspendido, en cada una de estas modalidades contractuales respecto de las personas trabajadoras afectadas por estas». Es decir, que la interrupción de sus contratos conllevará que estos se reanuden una vez termine la medida temporal con el final del estado de alarma por el COVID-19 con un periodo pendiente idéntico al paralizado, de forma que alcance «la duración máxima efectiva». Esta normativa se aplicará también a los ERTE ya en vigor.
Como recuerda en su análisis el portal 'IUSport', todas las relaciones contractuales de los deportistas profesionales son de duración determinada de acuerdo al Real Decreto 1006/1985, por temporadas o fechas concretas. En caso de ERTE, los contratos de los futbolistas que expiraban el 30 de junio se prorrogarían de forma automática. Sin embargo, este periodo ampliado difícilmente coincidirá con el plazo que LaLiga busque para finalizar la competición, ya que cada club se acogería a la medida temporal en una fecha distinta.
Rechazo de los futbolistas
Aunque el Granada no se ha pronunciado aún, se mantiene como tantos otros a la espera de los acontecimientos que puedan seguir a la reunión de mañana con LaLiga. Ayer, el periodista Isaac Fouto informó que los futbolistas de Primera y Segunda división rechazaron esta medida en una reunión telemática con David Aganzo, presidente de la AFE. Algunos sí negociarán una rebaja de sus fichas.
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