El fútbol castiga al Granada por su falta de ambición

El Granada se adelantó pronto y se dejó llevar. Pedro marcó mediada la primera mitad y los rojiblancos entregaron el partido al rival, que buscó la meta de Javi Varas una y otra vez hasta que logró el gol del empate. Fue tras un penalti dudoso, sí, pero tanto paseó el cántaro hasta la fuente que al final al Granada se le rompió el triunfo. En los últimos minutos el equipo granadino se quedó con diez por una rigurosa expulsión de Baena y el resultado pudo ser aún peor.

Oltra decidió dar continuidad al once que no terminó de funcionar ante el Albacete y en la primera parte su propuesta no salió del todo mal. Los granadinos avisaron con un lanzamiento a balón parado de Pedro (m.13) y se adelantaron con una falta nuevamente lanzada por el ex zaragocista, que desde la corona del área decidió probar suerte por bajo, sorprendiendo a la barrera y al guardameta rival (0-1). Entre medias de esas dos jugadas Borja Iglesias perdonó al equipo andaluz al no aprovechar una mala cesión de Álex Martínez para batir a Javi Varas, que tapó bien su portería en el uno contra uno y acabó despejando la pelota con la cara. Una vez encajado el gol el Zaragoza dio un paso hacia adelante y el Granada dejó de generar fútbol. Los acercamientos del equipo maño a la meta de Varas fueron constantes pero el cuadro de Natxo González no culminó sus acciones ofensivas con demasiada claridad.

En la segunda mitad el partido apenas cambió y el Zaragoza siguió dominando ante un Granada excesivamente conformista, que no aprovechó la poca efectividad del rival para intentar buscarle las cosquillas a la defensa aragonesa y sentenciar el partido. Espinosa, gris por segundo partido consecutivo, fue sustituido por Alberto Martín. Ni Pierre Kunde ni Adrián Ramos tuvieron minutos en un encuentro en el que el cero a uno podía permanecer en el marcador hasta el minuto noventa. O no. Borja Iglesias buscó el empate con un disparo cruzado que se le marchó desviado (m.63) y pocos minutos más tarde el 'nueve' del Zaragoza cayó derribado en el área en una acción en la que luchó un balón por alto con Germán. El colegiado pitó penalti y el propio Borja Iglesias no desaprovechó la oportunidad para igualar el choque (1-1).

A partir de ahí el dominio del Zaragoza fue aún mayor. El Granada, castigado por especular con el cero a uno durante más de media hora, vio cómo Ángel no acertaba a la hora de subir el 2-1 al marcador y cómo Toquero aprovechaba su envergadura para hacerse un sitio en el área ante la presión de Víctor Díaz y acabar rematando el poste. En la recta final el colegiado expulsó a Baena al mostrarle una muy rigurosa segunda amarilla. Además, Germán se lesionó y tuvo que ser sustituido por Charlie Dean, por lo que los granadinos terminaron dando por bueno el empate ante un equipo en superioridad numérica después de ir ganando durante más de media hora. El margen de mejora de este Granada parece bastante amplio a día de hoy.