El esfuerzo en Reus tiene premio

El equipo de Diego Martínez lo pasó francamente mal en Reus, a pesar de que intentó llevar el control del partido y de que gozó de la mayoría de las ocasiones del mismo. Puertas y el 'nuevo' en el once, Pozo, le dieron trabajo a Edgar Badía en los primeros compases del partido aunque fue Víctor Díaz el que, con un misil teledirigido desde fuera el área, puso por delante a su equipo (0-1). El golazo del lateral derecho fue respondido por el equipo catalán, que a pesar de sus problemas económicos cuenta con buenos jugadores y que rozó la igualada en una acción antes del descanso en la que Moore cabeceó alto un buen servicio de Planas desde la banda izquierda.

En la reanudación el conjunto que dirige Xavi Bartolo sí que fue más efectivo y Linares tardó tres minutos en subir el 1-1 al marcador. El veterano atacante se aprovechó del desasosiego del equipo granadino, que protestaba al árbitro que no parara el juego porque Adrián Ramos estaba tendiendo en el suelo, y de un fallo de Rui Silva al controlar un centro desde la izquierda para establecer el tanto del empate con un disparo en una posición franca que primero pegó en el larguero y posteriormente botó dentro de la portería andaluza.

El Granada quiso volver a ponerse por delante en el marcador y nuevamente se hizo con las riendas del encuentro, pero ni Vadillo (en dos ocasiones), ni Ramos ni Rodri estuvieron especialmente precisos en las finalizaciones. Fue un genial centro de Pozo el que encontró la testa de Antonio Puertas, al que le bastó con peinar el esférico para desviar su trayectoria y llevar el delirio a las gradas del Municipal de Reus, en las que hubo una nutrida presencia de granadinistas. El Granada aguantó el empuje local en los últimos minutos y sube a su casillero tres puntos de oro de primera ley, que le permitirán seguir alojado en los puestos de ascenso directo durante otra semana más.