Un debate interno: plantilla corta o larga

El Granada tiene una plantilla con un número apreciable de efectivos y variedad, pero todavía tiene margen en cuanto a fichas del primer equipo y mantiene el radar activado en la búsqueda de refuerzos que mejoren o complementen lo que hay. Es, por tanto, un momento clave para decidir si termina por confeccionar un grupo amplio, que puede acarrear algún problema de gestión, o uno más reducido, bajo el riesgo de que las lesiones o bajos rendimientos provoquen que falte algún recurso durante la campaña. Todo tiene sus pros y contras,

No es una cuestión que quite el sueño en las oficinas. La satisfacción es muy elevada con las operaciones que se han firmado, múltiples en cuanto a entradas y salidas. Alfredo García Amado y Nico Rodríguez han emprendido un trabajo prolífico. Sin perder de vista el criterio económico, el club ha podido firmar prácticamente a sus opciones preferentes sin problemas de inscripción hasta la fecha gracias a los importantes traspasos que este dúo acometió y que proporcionaron solvencia. Ahora, en el último arreón del bazar estival, la dirección está abierta a zanjar últimos flecos. A la ya subrayada opción de Alberto Perea para la banda izquierda se une la posibilidad de un futbolista más para la vanguardia. Hay algunos que interesan o han interesado y otros que son ofrecidos y tenidos en consideración. El dilema está en el perfil exacto de ese jugador de vanguardia que pueda ayudar al resto.

Karanka, por ejemplo, no es demasiado partidario de adquirir un 'nueve' puro. Se da por satisfecho con las variantes que le ofrecen Matías Arezo, Jorge Molina y, sobre todo, José Callejón, al que intenta consolidar como ariete, con mucha libertad de movimientos. Es el matiz que quiere imprimir a su habitual 4-2-3-1. Seguramente, al entrenador le gustaría un jugador con velocidad y cierta polivalencia. Era el patrón al que respondía Manu Vallejo, que se ha ido complicando.

El mercado pone sobre la mesa a futbolistas cuyo hábitat está en el área contraria, pero no opciones que hagan enloquecer a la cúpula de mando. Además del rendimiento de Callejón, en el Granada todos quieren dejar el tiempo suficiente a Arezo para que explote y no renuncian a que Molina todavía pueda aportar su experiencia y efectividad ante la meta del adversario.

El Granada tiene 21 fichas A en estos momentos, debido a que Ricard Sánchez, Pepe, Torrente y Bryan Zaragoza portan dorsal del filial, aunque estén en la dinámica de los 'mayores' –los tres primeros, con contrato de primer equipo–. Esos 21 son André Ferreira y Raúl Fernández en la portería; Víctor Díaz, Miguel Rubio, Ignasi Miquel , Cabaco, Quini, Jonathan Silva y Carlos Neva en defensa; Petrovic, Meseguer, Bodiger y Sergio Ruiz como pivotes; Puertas, Rochina, Uzuni, Melendo y Soro como alternativas en extremos o mediapunta; y a José Callejón, Molina y Arezo en el frente. Sumarían 25 con los otros cuatro más jóvenes. Torrente y Neva, entre los principales, aún tienen un periodo de recuperación. Si llega Perea serían 26. Si lo hace otro más, 27. Puede parecer mucho, pero la temporada es larga e influye, aunque en el último ascenso, con Diego Martínez, el plantel fue más corto.

De la misma forma que las puertas están abiertas para una o dos altas, tampoco se puede descartar llegados a estas fechas que haya alguna salida. Los dos partidos marcan tendencias y los menos protagonistas tal vez sopesen otros destinos. Es dentro de esta situación especulativa como podría aterrizar un defensa como Laguardia, entrenando todo el verano en Vitoria en solitario, sin renovar aún con el Alavés.