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Sábado, 19 de septiembre 2020, 18:27
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En Pradollano, en la estación invernal de Sierra Nevada, ha surgido un movimiento independentista. Un grupo de vecinos quieren separarse de Monachil, municipio al que pertenecen, porque consideran que el Ayuntamiento se ha desentendido totalmente de ellos. Y la cosa no acaba ahí: los 'secesionistas' ya han mantenido contactos con el Consitorio de Güéjar Sierra para pasar a formar parte de esa localidad, siempre, claro está, que antes logren su objetivo de emanciparse de Monachil, algo que los promotores de la iniciativa saben que es «muy complejo», pero no una quimera. «Esa posibilidad está en la ley», indica a IDEAL Javier Lucas, presidente de la asociación de residentes de Pradollano, que es la que abandera el movimiento.
Por su parte, el alcalde de Monachil, Jose Morales, ha calificado de «absoluto disparate e inocentada de mal gusto promovida por intereses políticos» la propuesta de la Asociación de Vecinos de Sierra Nevada de que la urbanización de Pradollano pase a depender administrativamente del Ayuntamiento de Güejar Sierra y se segregue del de Monachil.
La alusión a la existencia de «intereses políticos» en esta controversia no es inocente: Morales pertenece al PSOE y el regidor de Güéjar Sierra es el senador del PP José Antonio Robles.
De hecho, Lucas, el dirigente del colectivo vecinal que exige la 'autodeterminación' de Pradollano, recordó que se reunieron este pasado miércoles con Robles para darle a conocer sus intenciones.
Sea como fuere, y al margen de las disputas entre los partidos, Lucas afirmó que han elegido el difícil camino de la independencia «porque estamos sumamente hartos del alcalde de Monachil», es «un muro y no atiende a ninguna de nuestras peticiones», es una «cuestión de agotamiento, sufrimos una falta de mantenimiento por parte de Monachil que nos ha llevado al hartazgo y no podemos quedarnos de brazos cruzados», se lamentó.
En este sentido, pone como ejemplo del maltrato que aseguran padecer «que la vía urbana que atraviesa nuestra localidad no haya sido asfaltada en décadas, con peligrosas alcantarillas destapadas o frecuentes tramos sin iluminar debido al estado del alumbrado público«.
La visión del alcalde de Monachil es bien diferente. «Los vecinos de Monachil, y los de Sierra Nevada, pueden estar muy tranquilos, porque este Ayuntamiento jamás permitiría que Pradollano dependa de otro municipio, por mucho que el presidente de una asociación de vecinos encargue un disparatado informe jurídico que intente justificar lo contrario«, señala Morales.
Respecto a las acusaciones de haber abandonado a Pradollano, el regidor socialista resaltó que el Gobierno de España concedió una subvención de 487.000 euros «para cambiar las luces de Pradollano por LED». También se refirió a «los más de 300.000 euros que el Ayuntamiento ha invertido en los últimos cinco años para mejorar el asfaltado, las barandas o los bordillos de Pradollano; los 55.000 del proyecto 'Monachil Sierra Nevada: shopping para tod@s' o los más de 150.000 que se han destinado a mejorar la depuradora de Sierra Nevada».
De momento, las espadas siguen en alto. Y nunca mejor dicho.
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