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César, en una de sus últimas fotos con vida, escribe sobre un folio en un bar de La Coruña. :: EL CORREO GALLEGO
SOCIEDAD

La mala madre

Fría, mentirosa y calculadora. Así define a Mónica un policía que la interrogó. Amante de la noche y de los flirteos ocasionales, su niño nunca fue una prioridad para ella

ARTURO CHECA

Viernes, 3 de diciembre 2010, 02:47

La tarde del 10 de julio de 2008, César acababa de terminar sus deberes de tercero de Primaria. Hasta en verano era un niño ... aplicado. Los 'cates' no eran lo suyo. A los nueve años podía presumir de ir a curso por año. Guardó en un pequeño estuche cuadrado sus lápices de colores y una goma. Lo dejó sobre un escritorio junto a sus tesoros más preciados: un fajo de cromos, varios cómics de manga japoneses (con el número 28 de 'Naruto' entre sus preferidos) y dos bloques de metacrilato con una araña y un escorpión de plástico dentro. Jamás se separaba de ellos.

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