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Casi 200 trabajadores afectados por los ERTE de las concesionarias municipales de Granada

Casi 200 trabajadores afectados por los ERTE de las concesionarias municipales de Granada

Ebone, responsable de las clases en las piscinas, y Eysa, que lleva la zona azul, son las empresas que han aprobado ya este mecanismo para hacer frente a la situación

PABLO RODRÍGUEZ

Miércoles, 25 de marzo 2020, 01:44

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La expansión del COVID-19 está teniendo un impacto inmediato sobre el empleo, que se está viendo afectado tanto directamente por el virus, a través de los contagios, como por las medidas decretadas por el Gobierno para evitar la propagación. La obligación de permanecer encerrados en casa y su consecuencia directa, la suspensión de todos aquellos servicios considerados como no esenciales, está provocando un desplome económico en muchas empresas, que se están viendo arrastradas a aprobar medidas excepcionales para tratar de sobrellevar la crisis.

Una de ellas es el ERTE, siglas bajo las que se esconde el expediente de regulación temporal de empleo. Se trata de un procedimiento que permite a las empresas suspender o reducir la jornada de trabajo por causas derivadas de fuerza mayor o de otro tipo, sean económicas, técnicas, organizativas o de producción. La medida, que puede afectar a toda la plantilla o sólo a una parte, está siendo aprobada por algunas de las compañías que realizan servicios para el Ayuntamiento y afecta ya a casi 200 trabajadores de estas concesionarias, según confirman fuentes sindicales a IDEAL.

Ebone es una de ella. Esta empresa, que presta servicio en muchos de los centros deportivos de la ciudad y que, entre otras actividades, es responsable de las clases en las piscinas municipales, comunicó recientemente a los trabajadores la aprobación de un ERTE que afectaba a 140 personas. La medida es consecuencia directa del cierre de los espacios en los que hasta ahora venían desempeñándose el servicio, una decisión tomada por el Ayuntamiento apenas unos días antes que el Gobierno lo hiciera efectivo con el decreto del estado de alarma.

Otra de las concesionarias que anunció un procedimiento de este tipo es Eysa. En este caso, se trata de la empresa que gestiona la zona azul en la capital nazarí y en otros municipios de la provincia como Motril. La medida afecta a 64 trabajadores de los que una parte, en torno al 20%, realizan sus labores en la Costa. Aquí, como en el caso de Ebone, el expediente también se vincula al virus. Con la población recluida mayoritariamente en sus casas, el impacto económico en la actividad era total. Además, el propio espacio habilitado para este tipo de aparcamiento había sido puesto a disposición del personal sanitario estos días por parte de Movilidad.

Transportes Rober, responsable del servicio de autobuses urbanos, también aprobó un pequeño ERTE, aunque limitado solo al personal de oficina y revisores. Según confirmó ayer el presidente del comité de empresa, José Manuel Roldán, la disposición de la compañía es «muy buena» y está acordando cada paso con los representantes sindicales para reducir el impacto al mínimo. Ambas partes acordaron la semana pasada medidas paliativas como la rotación de la plantilla en servicio o la toma voluntaria de vacaciones y descansos para evitar el ERTE hasta al menos el 12 de abril.

Mal menor

Para los sindicatos, este tipo de medidas puede ser, en este contexto, un mal menor. «Garantiza la no destrucción del empleo y la vuelta a la normalidad de los trabajadores cuando superemos este momento», recuerda el secretario de Organización de CCOO en Granada, Daniel Mesa. El dirigente, no obstante, advierte de malas prácticas en las empresas y denuncia que algunas están despidiendo a personal aún teniendo garantizados ingreso o acabando con aquellos trabajadores temporales o fijos discontinuos.

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