Cae desde al escalar por la fachada para colarse en una fiesta en Granada rompiendo el confinamiento

El herido había estado previamente en esa fiesta varias horas. Cuando acudió a su vivienda, ubicada a unos quinientos metros de donde era la fiesta, en la misma barriada de la Chana, este vecino se dio cuenta de que no llevaba las llaves y presuntamente el móvil tampoco. Esa fue la razón que le hizo volver a la fiesta, porque no podía entrar a su casa donde convive con un hermano, que sufre una minusvalía física severa.

Cuando llamó por el telefonillo del portal al piso donde estaban de juerga sus amigos nadie le contestó. Insistió una y otra vez, pero sin resultado. Por ello decidió encaramarse a una ventana enrejada del bajo de ese edificio, de ahí trepó a la primera planta, donde se apoyó en otra ventana con rejas para subir a la segunda planta; fue en el último paso, cuando intentó agarrarse a unas cuerdas de un tenderete para alcanzar el balcón del tercer piso cuando cayó al vacío. Un ciudadano que escuchó el golpe y las quejas del herido decidió llamar a la central de la policía local de Granada advirtiendo de la presencia de un individuo tirado en la calle.

La pareja de agentes se encontró con este individuo de 49 años malherido, quien apenas podía articular palabra, tumbado en la calle. Desprendía un fuerte olor a alcohol. Un dispositivo sanitario le prestó los primeros auxilios para trasladarlo al hospital posteriormente, donde se recupera de los distintos traumatismos óseos sufridos en su caída.

Curiosamente, las llaves del piso del herido aparecieron cuatro o cinco escalones antes de la planta donde está su piso en la Carretera de Málaga, lo cual se traduce en que seguramente se le cayeron del bolsillo sin que se diera cuenta. Las encontró una vecina.

Policía Local recibió esa misma madrugada del domingo un aviso de un particular denunciando mucho ruido en el interior de un piso, ubicado en una tercera planta, de la calle Echegaray de la Chana. Se trata de la misma vivienda a la que estaba intentando acceder el herido desde la fachada del edificio para colarse en la fiesta.

Este hombre, de 49 años, ingresó en el hospital de Neurotraumatología y casualmente lo instalaron en la misma habitación donde estaba el ciclista atropellado el sábado por la tarde en el Camino de Ronda.Tanto uno como otro evolucionan bien de sus heridas.